María Patiño ha tenido la boda que deseaba. La periodista se ha casado con su gran amor, el actor venezolano Ricardo Rodríguez, en la playa de un país muy lejano. Haciendo gala de su discreción, la pareja se ha dado el 'sí, quiero' en la más estricta intimidad, porque si hay algo que caracteriza a María y Ricardo es el hermetismo con el que viven su relación. Sabemos que llevan más de una década juntos y que recientemente se han mudado a Chamberí, una de las zonas más exclusivas de Madrid, pero ambos evitan hacer declaraciones públicas sobre su historia de amor y en sus respectivas cuentas de las redes sociales es casi imposible encontrar una foto en la que aparezcan juntos.
Sin embargo, hace unos años María concedió una entrevista a Diez Minutos en la que hablaba de cómo era su vida al lado de Ricardo. "Sabe escuchar, y eso es una virtud que no todo el mundo practica", decía. "Me encanta porque tiene muy buen carácter", añadía.
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La pareja se conoció en Sevilla y Ricardo no dudó en instalarse en Madrid cuando la carrera televisiva de la presentadora comenzó a subir como la espuma. El actor tiene un amplio currículum. Ha trabajado como presentador, ha hecho teatro, cine, televisión y publicidad. Su última película ha sido El último invierno, de Julio de la Fuente, a cuyo estreno acudió con María. También le hemos visto en series como Gran Reserva o B&B, así como trabajos publicitarios para Vitaldent o Foster Hollywood.
Lo más curioso es que Ricardo ha compartido escena con su mujer en La cara del diablo, un corto ambientado en los años 50 que recrea la historia de María (María Patiño) y Ramón (Ricardo Rodríguez), un matrimonio de conveniencia, en el que ella vive completamente aterrada por el hombre del que un día se enamoró. La periodista confesó durante el estreno del corto, en abril de 2015, que estaba muy contenta con esta experiencia, pero que no cambiaria su profesión por nada del mundo.
Al margen de su carrera como actor, Ricardo es uno de los socios de Ditirambo Food N' Drinks, un local situado en la calle Alfonso X, y un apasionado del surf, como se observa en las imágenes que comparte. Además, siempre que puede acude al teatro y adora pasar tiempo con su familia. Según contó María, el actor se trajo de Venezuela a su madre y a su hermano y no duda en hacer numerosos planes con ellos.