Isabel Pantoja reconoció hace muchos años que, tras la muerte de Paquirri en 1984, le costó mucho regresar a la finca de Cantora. "Se me venía la casa encima", reconoció la tonadillera, que mantuvo la casa cerrada durante 15 años. Pero con algo de tiempo y determinación, consiguió hacerla su hogar y su refugio. "Lo que más me gusta es venirme aquí, a curar mis heridas de combate como la leona, y aquí sano y me crezco y me vuelvo a poner de pie para seguir adelante", confesaba a la revista ¡HOLA! la folklórica. Así lo hizo tras pasar por la cárcel acusada de blanqueo de capitales: Cantora, que también pertenece a su hijo Kiko Rivera, le ofreció cobijo y le otorgó bienestar. Es allí donde Isabel Pantoja celebra hoy su 63 cumpleaños rodeada de amigos y familiares. Dale al play y no te pierdas la historia de la finca más simbólica de la tonadillera.