Ya ha comenzado el juicio de divorcio entre Haya de Jordania y el emir de Dubái en el Alto Tribunal de Londres. Se trata de un caso complicado que Mohammed bin Rashid ha intentado trasladar de la capital británica a los Emiratos Árabes sin éxito, también a sus hijos. Además intentó imponer restricciones a los medios de comunicación como que permanecieran fuera de la sala, algo que sí ha conseguido, pero no puede evitar que el caso atraiga la atención mediática de medio mundo, tal y como dictó el juez Sir Andrew McFarlane. Entre las primeras peticiones de la princesa huida ha pedido protección para evitar que sus hijos sean víctimas de matrimonios concertados, la custodia de ambos pequeños y una orden de alejamiento contra el que fuera su marido.
Aunque no se conocen más detalles sobre estas tres peticiones, se sabe que los dos niños están viviendo en este momento en la casa de su madre en Kensington, al oeste de Londres, que tiene un valor de 93 millones de euros. Todas las decisiones sobre su futuro tienen que tomarse con la aprobación del juez, presidente de la división de Familia del Tribunal. Por decisión juidicial no se permite que los nombres, edades y otros datos de los niños se hagan públicos.
La princesa Haya fue vista por primera vez desde que abandonara su hogar en Dubái el martes en el Alto Tribunal de Londres para la audiencia preliminar, en la que estuvo acompañada por Fiona Shackleton, la letrada que representó al príncipe Carlos durante su divorcio de Diana de Gales. El emir no estuvo presente en esta primera sesión del proceso judicial.
Princesa Haya nació en Jordania hace 45 años fruto de la relación entre el rey Hussein y la medio hermana del rey Abdullah II. Recibió su educación en Reino Unido y ha llegado a representar a su país como amazona en los Juegos Olímpicos de Sídney. Se casó en 2004 con el emir Mohamed, que tenía entonces 55 años y era el dueño de unos establos de competición, convirtiéndose en su sexta mujer. Según han publicado varios medios, el billonario es padres de hasta 23 hijos de diferentes mujeres.
"Estos procedimientos están vinculados con el bienestar de los dos hijos del matrimonio y no tiene nada que ver con el divorcio ni las finanzas", se puede leer en un comunicado consensuado por los abogados del vicepresidente y primer ministro de Emiratos Árabes Unidos, de 69 años, y la hija del rey Husein de Jordania, de 45. Según los representantes de ambos, que no han dejado claro si habrá otro procedimiento para resolver su divorcio, el tribunal escuchará a las partes para "determinar el asunto del bienestar de los menores en una vista final".
Quedan pendientes, por tanto, los asuntos relacionados con los términos de la separación y los financieros. En cualquier caso tanto la princesa como el emir se encuentran muy bien preparados con los mejores abogados especializados en la materia. Mohamed Bin Rashid está representado por Helen Ward, conocida como "la gran dama de los divorcios" por haber llevado los casos de Madonna, Bernie Ecclestone o Paloma Picasso.