Tan solo un mes después de su boda, Pilar Rubio y Sergio Ramos han vuelto a convertirse en el centro de la noticia, aunque en esta ocasión, el motivo es mucho menos agradable. El matrimonio, que ha retomado de nuevo la rutina tras una inolvidable luna de miel por Egipto y el Caribe -Pilar ya está en Madrid mientras Sergio se encuentra haciendo la pretemporada en Canadá- ha recibido un duro varapalo que podría tener importantes consecuencias.
Al parecer la pareja, quien se encuentra reformando su residencia de La Moraleja, habría burlado las normas medioambientales y habría talado varios árboles sin permiso para ampliar su vivienda tal y como ellos deseaban. Por este motivo, este viernes el Pleno Extraordinario del Ayuntamiento de Alcobendas aprobaba por unanimidad sancionar con 250.000 euros a una sociedad vinculada al futbolista -encargada de dicha reforma- por talar entre 50 y 90 ejemplares de pinos, chopos y encinas centenarias dentro de su propiedad.Además de los 250.000 euros, la empresa conocida bajo el nombre de Aguileña de Inversiones SL, será obligada a plantar el triple de árboles que han sido talados en el lugar que indique el ayuntamiento.
La pareja compró la casa en julio de 2017 y decidió tirarla abajo para volver a levantarla a su gusto. La antigua residencia contaba con una extensión de 1.470 metros construidos en una parcela de 15.000 metros cuadrados. Al parecer Sergio y Pilar adquirieron el inmueble en una subasta millonaria y aunque en aquel momento tuvieron que desembolsar 1,5 millones de euros, una vez finalizada las obras, la residencia podría llegar a alcanzar los 12 millones.