Llevaba aislada desde que volviera de Supervivientes y no se esperaba que, entre bambalinas del plató le dieran la enorme sorpresa de reencontrarse con su hija de 15 años. Mónica Hoyos ha emocionado y divertido a sus seguidores cuando se ha encontrado con Luna, la niña que tuvo fruto de su relación con el presentador Carlos Lozano. Al principio, la peruana se ha mostrado muy sorprendida por lo mucho que había crecido la joven en estos tres meses, a pesar de que ella insistía en que solo había crecido unos centímetros.
En el vídeo se aprecia la cara de sorpresa de Mónica, que no paraba de repetir el nombre de su hija mientras la abrazaba con lágrimas en los ojos. "No es que Luna esté muy alta, es que Mónica es muy baja", bromeaba Carlos Lozano cuando volvían a conectar con el plató y dejaban a la concursante- que se quedó a las puertas de la final- aún con la boca abierta.
"No puede ser, yo la deje diferente, ¡¿cómo estas tan alta?!", exclamaba la última expulsada antes de la gran final. "¿Te he gustado?", preguntaba a su hija.
Más tarde, la concursante entraba en el plató y era recibida por todos sus familiares con abrazos y buenas palabras. A pesar de que sus compañeros de la isla no se levantaron en un primer momento para saludarla, después de que Jorge Javier lo señalara fue ella la que, personalmente, se acercó a abrazarles uno a uno.