Malú y Albert Rivera: las claves de una relación que al fin han hecho oficial tras meses de rumores
La cantante y el político han aparecido por primera vez ante los medios como pareja
Fue el pasado febrero cuando comenzaron a sonar los rumores de una posible relación entre Malú y Albert Rivera, informaciones ante las cuales ellos daban la callada por respuesta. Tanto la cantante como el político han destacado siempre por ser herméticos en cuanto a su vida privada se refiere y han preferido no hablar de su estado sentimental ni dar detalles de sus relaciones. Sin embargo, cuatro meses después, todo ha cambiado y han aparecido por primera vez juntos ante los medios. Una gastroenteritis aguda provocó que el líder de Ciudadanos tuviese que ser ingresado el 10 de julio y su alta hospitalaria dos días después es lo que ha propiciado esta buscada imagen en la que los dos protagonistas se han mostrado completamente naturales ante los medios de comunicación que se encontraban a las puertas del Hospital Puerta del Sur de Móstoles.
Malú acompaña a Albert Rivera en su salida del hospital
Desde que empezaron a circular las informaciones de romance entre ellos, los dos se convirtieron en el centro de todas las miradas. En estas primeras semanas evitaron hacer declaraciones de su nueva relación sentimental. De hecho, cuando a él le preguntaban en la estación del AVE al ir a un acto político, se limitaba a decir que "todo está bien". La única persona que en esas primeras semanas habló fue el padre de Malú, Pepe de Lucía, quien aseguraba en Semana que conocía al catalán desde hace tiempo y que le consideraba su amigo.
La campaña electoral hizo que poco después Rivera visitase Espejo Público, donde Susanna Griso le preguntó al líder naranja que cómo llevaba "eso de verse en revistas de corazón por sus relaciones personales". La periodista le preguntaba que si esa notoriedad le estaba pasando factura, una cuestión ante la cual él siguió echando balones fuera. "Estoy muy tranquilo, dedicándome a trabajar que es lo que he hecho durante toda mi vida. Respeto profundamente el derecho a la intimidad de todos los españoles. Por eso soy liberal también, porque respeto todos los derechos, los de todos los españoles", zanjaba. Es precisamente en este espacio de Atresmedia donde, semanas después, se abría y reconocía haber comenzado una nueva relación sentimental. Casi de manera simultánea, ella decía en redes encontrarse "feliz y tranquila" en lo personal.
No fue hasta mediados de junio cuando se tuvieron las primeras fotos oficiales de ellos compartiendo tiempo juntos. ¡HOLA! ofrecía unas imágenes de ellos saliendo de un restaurante de Madrid y reuniéndose luego con la madre de la cantante. Una portada por la que Ana Rosa le preguntaba a Albert Rivera durante una entrevista. "¿Es feliz?", le decía. "Juzga tú misma. Te agradezco el trato y gracias por cómo lo habéis tratado" contestaba mientras la presentadora comentaba "sonríe, sonríe". A lo que él respondía: "Sonrío, sonrío".
La relación de Malú y Albert Rivera volvió al ojo del huracán la pasada semana, cuando un programa de televisión aseguraba que el romance había llegado a su fin porque ella no entendía que el político antepusiera su vida profesional a la personal. Unos rumores que quedaron desmentidos al ser fotografiados el 6 de julio llegando en coche a visitar la casa que la artista compró a finales de año y que ahora está reformando.
A pesar de que a lo largo de estos siete meses que llevan juntos ambos han llevado la discreción por bandera, ha sido ahora, en el momento más inesperado, cuando han hecho oficial su romance. Desde Ya es mediodía, Sonsoles Ónega ha explicado que Malú no solo ha acudido a recoger a Albert, quien ahora tendrá que mantener unos días de reposo domiciliario para terminar de recuperarse sino que fue la propia cantante quien trasladó a su pareja sentimental a este centro cuando el catalán sufrió un desmayo. Añade, además, que durante el tiempo que se ha extendido este ingreso, ella se ha mantenido incondicionalmente a su lado, haciéndole compañía mientras se recuperaba de su dolencia. Algo con lo que queda claro que se ambos se comportan de la misma manera que cualquier otra pareja a pesar de que lleven la discreción por bandera.