Nueve meses después del nacimiento del pequeño Jon, su primer hijo con el fotógrafo Mario Chavarría, Dafne Fernández prepara su vuelta al trabajo. Así lo avanza la actriz a HOLA.com, durante la presentación de las propuestas gastronómicas de la ginebra japonesa Roku Gin. Allí, además de revelar que el pequeño ya comienza a decir sus primeras palabras y a andar, Dafne confiesa que no le ha sido tan fácil recuperar la línea. Eso sí, lo ha conseguido, tal y como ha demostrado compartiendo una provocativa imagen con la que ha subido la temperatura.
Estamos en la presentación de unas propuestas gastronómicas y tú de eso sabes mucho después de Mastercehf
Bueno… Me gustaría saber mucho más –se ríe–. Me volví una cocinillas cuando supe que iba a participar en el programa. Luego ya después… La verdad es que estuve dos meses pidiendo comida a domicilio –se ríe–. Como me daba unas palizas a estudiar, terminé un poco saturada. Pero es verdad que me ha servido muchísimo para mi vida.
¿Has aplicado esos conocimientos a las comidas del pequeño Jon?
Sí, sí.
¿Cómo llevas la maternidad ahora que tu hijo está a punto de cumplir su primer año?
El 30 de agosto lo cumple, sí. Yo alucino con el tiempo, que ha pasado volando. Lo más alucinante de todo es que no sabía que se podía amar tanto. Cuando nació mi hijo, yo decía: “Qué bonito, cuánto le quiero”. Pero, a medida que pasa el tiempo, le vas queriendo más, más y más. Tengo la sensación de que me va a explotar el corazón. Lo hablo con otras madres y es increíble. Él es un niño increíble, maravilloso… Es buenísimo y superdivertido.
Entonces, ¿deja dormir en casa?
Pues, mira, lleva una semana que duerme. Se está haciendo mayor –se ríe–. Además, es supercariñoso.
¿Ya dice sus primeras palabras?
Sólo “papá” y “mamá”.
¿Qué dijo primero?
Primero, “mamá”. Luego se le olvidó y, durante un tiempo, nos llamaba a los dos “papá”. Ahora ha vuelto a decir “mamá”.
¿Qué sentiste cuando te llamó por primera vez “mamá”?
Yo sé que, al principio, lo decía sin dirigirse a mí, pero ahora tengo la sensación de que sí, que lo dice conscientemente y: “bah, me muero”. Cuando diga “mamá, te quiero”, no sé cómo voy a reaccionar. Me voy a morir –se ríe–.
El pequeño ya gateará sin parar, ¿no?
¡Y anda! Ayer dio su primer pasito.
Cada día será un mundo nuevo en casa.
Sí. Estoy muy contenta de que sea tan explorador, pero, por lo que veo en otros niños, me ha robado dos meses de bebé. Normalmente, los niños empiezan a andar al año y él tiene solo nueve meses.
Por lo que cuentas, es un niño muy espabilado.
Es muy espabilado. ¿Sabes qué pasa? Es que le hemos dedicado mucho tiempo. Hemos estado con él 24 horas y le hemos estimulado muchísimo. Bueno, cada niño es un mundo… También le metimos en la piscina muy pronto… Creo que han sido una serie de cosas y está muy espabilado.
¿A quién ha salido? ¿Al padre o a ti?
Tiene cosas de los dos. No sé… Es capri… Tiene carácter y sí que me veo ahí. Cuando hay algo que no me mola, digo “hasta aquí”.
Ibas a decir caprichoso…
Bueno, es que caprichoso es por mi marido –se ríe–. Es caprichoso, pero sabe cómo ganarse lo que pide. Tiene cosas de los dos. También físicamente. Cuando nació, era Mario completamente. Luego era yo. Tiene los labios como yo y los ojos rasgadillos… Ahora es una mezcla, aunque veo muchas cosas de Mario.
Jon parece un bebé trampa. ¿Barajáis Mario y tú darle un hermano o es demasiado pronto?
A nosotros nos encantaría, pero es verdad que ahora lo que me apetece es volver a mi rutina. Además, tengo proyectos muy chulos.
¿Para cuándo?
En septiembre empiezo todo.
¿Te genera alguna inseguridad la vuelta al trabajo? Ya comentaste que lloraste cuando te fuiste de viaje a Nueva York con tu marido en abril y dejaste al niño en España
Bueno… Ya lo sufrí en su momento. Supongo que era la primera vez, porque luego allí lo pasé divinamente y hubiese estado más tiempo. Supongo que lo llevaré bien.
¿Te lo llevarás al trabajo?
Depende de cómo se dé.
También le has podido dedicar unos meses al bebé, que es algo que no pueden hacer todos los padres
He tenido esa suerte, aunque yo he tenido que dejar de trabajar.
Es complicado para una actriz
Todo el mundo tiene que sacrificar algo y tomar decisiones supone decir a una cosa que no y a otra que sí. Yo estoy contenta, pero, en mi caso, dejar de trabajar significa dejar de ganar dinero y desaparecer un poco. Pero, bueno, estoy contenta. He disfrutado de él y ha compensado. También me he recuperado físicamente.
¿Cómo has recuperado tu cuerpazo?
Bueno, todavía me queda. Yo siempre veía a la gente famosa que daba a luz, salía del hospital y estaba maravillosa. En mi caso, tampoco ha sido así. La gente me verá y dirá que no me queje, pero cada una siente cómo es su cuerpo.
¿Has notado la presión mediática en ese aspecto?
Hay muchas mujeres que me siguen en las redes que me apoyan mucho. Al final, tenemos que estar bien, pero los tempos son otros y que hay que respetar al cuerpo. Es verdad que hay que trabajárselo, pero como todos.
Hace unos días demostraste lo bien que estás físicamente al publicar un desnudo tuyo
Bueno, yo soy muy alta y tengo el cuerpo bastante domado al hacer danza durante tantos años. El cuerpo tiene memoria, pero me lo he tenido que currar mucho.
¿Cómo has vivido la repercusión de la foto?
Bueno, muy bien. La gente la ha visto muy bien. Luego están las típicas que critican, pero no entiendo. Cada una que haga con su cuerpo lo que quiera.
Claro. ¿Por qué hay que dejar de ser sensual por ser madre?
Por supuesto. Cada uno que haga lo que le dé la gana, como si quiere ser sensual durante la maternidad.
¿Ya tienes planes para este verano?
Ahora estaré disfrutando de unos días en Granada con la familia y amigos, que mi marido es de allí. Un poco de playa y otro poco de montaña, que Granada tiene de todo. Luego me pondré a estudiar para volver a trabajar.
Entonces tu vuelta al trabajo está cerrada.
Bueno, hasta que no lo vea en la pantalla…
¿Cine, teatro o televisión?
Un poco de todo. Hay varias cositas.