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La última gala de Supervivientes 2019 dejó sin aliento a los seguidores del programa. Además de unas accidentadas pruebas, que dejaron a Nicolás Vallejo-Nágera con una fractura en la clavícula derecha y a Fabio y Albert Álvarez con un hombro dislocado, Mónica Hoyos vivió su velada más intensa. A pesar de ser la expulsada de la noche, la peruana regresó con sus compañeros tras ser repescada por la audiencia para cubrir la baja de Violeta Mangriñán, quien tuvo que volver a España por motivos de salud. Pese a la euforia por su continuidad en el 'reality', a Mónica no le sentó nada bien que sus compañeros no se alegrasen de su vuelta, especialmente a Isabel Pantoja, quien anoche confirmó que hubiera preferido el regreso a Playa Uva de Chelo García-Cortés.
© TelecincoConexión Honduras daba el pistoletazo de salida a su última entrega con la 'desconfianza' de la presentadora, que desencadenó un duro enfrentamiento entre ella y Dakota. Todo comenzó cuando Jordi González preguntaba a la tonadillera por el regreso de Mónica Hoyos a la isla. "Bueno, fue una sorpresa. Y nada, la volvemos a tener aquí con nosotros", contestaba la cantante de Marinero de luces, quien no parecía especialmente eufórica por la repesca de su compañera.
© Telecinco"¿Hubieras preferido a Chelo o a Mahi?", preguntaba el presentador, a quien inmediatamente respondió Dakota, en vez de Isabel Pantoja: "A Chelo". La madre de Kiko Rivera dio la razón a Dakota y confirmó que hubiera preferido tener a la colaboradora de Sálvame en el grupo, algo que enfadó a la ex de Carlos Lozano. "Pues está bien que me lo digas porque yo no lo sabía. Me lo acabas de decir", se sorprendía la actriz.
© Telecinco"Es evidente que con Chelo se lleva mejor y es su amiga", se metía la participante de Hermano Mayor. "Yo no me alegro nada de que haya vuelto al concurso porque si España la ha echado que se vaya a la calle. Esta señora me había acusado de haberle pegado a alguien", continuaba Dakota, mientras la peruana negaba sus palabras y aseguraba que solo había dicho que no le gustaban sus malos modos. A pesar de que Jordi González pidió a las supervivientes que no perdieran los modales, ambas se intercambiaron duras palabras. El único que intervino en este enfrentamiento con el fin de calmar los ánimos fue Omar Montes. No obstante, la tonadillera, que era una de las protagonistas de la discusión, no se pronunció.
