Belén Esteban ya ha puesto rumbo a la finca alcalaína de Vega del Henares para comenzar la sesión de maquillaje y peluquería que la dejará perfecta para su gran día. Antes de abandonar su vivienda de Paracuellos del Jaramá junto a su madre, la colaboradora ha intervenido en directo en el programa de Telecinco Socialité, donde ha reconocido que se encuentra muy "emocionada", aunque ha asegurado que a pesar de haber madrugado, ha descansado muy bien para estar llena de energía esta tarde.
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Con el semblante muy sonriente, pero con los nervios a flor de piel como es habitual en una novia horas antes de su boda, reconocía que se acordaba mucho de sus compañeros, sus amigos, su familia y todos aquellos que la acompañarán en un día tan especial. También pesan en estos momentos la ausencias y Belén recordaba emocionada a su padre, fallecido hace trece años, igual que su madre, que se dirigía con ella a la finca. "Mi madre está bien, se acuerda mucho de mi padre, pero bién", explicaba la televisiva en Socialité ya de blanco, aunque en un modo informal y sosteniendo algunos accesorios que guardaba en cajas.
El programa presentado por María Patiño también quiso tener un detalle con Belén y le obsequió con un colgante de San Judas Tadeo, que recibió especialmente emocionada y con la voz quebrada. La colaboradora aseguraba que era muy importante para ella y que se lo iba a poner, aunque "obviamente no hoy", matizaba en broma, ya que si hay algo que no se deja a la improvisación en estos casos es el look de la novia. En cuanto al vestido, insistía en declaraciones a los medios que la esperaban a la puerta de su casa, que a ella le gusta, aunque es consiciente de que "habrá críticas para todo". También ha adelantado que no se espera ninguna actuación ni en la ceremonia ni en la celebración. "Será una boda normal", decía.
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A partir de las 19:30 horas, la finca Vega del Henares acogerá la romántica ceremonia en la que Belén dará el 'sí quiero' a Miguel Marcos acompañada por el padrino, Raul Prieto, y ante 290 invitados. Este viernes aún llegaban los más rezagados a Madrid y Belén los recibía en su casa muy emocianada. Se trata de su familia de Córdoba, a la que tiene un cariño especial, y no podía disimular su alegría. “Mi familia de Córdoba, ya estamos todos. Qué feliz estoy”, decía la madre de Andrea Janeiro en un vídeo en el que compartía con sus seguidores el emotivo recibimiento a sus parientes.
Belén y Miguel pondrán esta tarde el broche perfecto a una historia de amor que comenzó gracias al azar ya que él es conductor de ambulancias y fue el encargado de trasladarla al hospital tras una bajada de azúcar. “Bendita bajada de azúcar”, contó la colaboradora en tono de broma en alguna ocasión.