)
Ha comenzado una nueva etapa para Toñi y Encarna Salazar, quienes han empezado a escribir este capítulo de su vida haciendo lo que más les gusta, cantar. Tras su paso por Supervivientes 2019, las Azúcar Moreno han seguido adelante con sus compromisos y se han vuelto a subir a los escenarios. Las hermanas reaparecían la noche de este sábado en la Plaza de la Constitución de la localidad madrileña de Getafe, donde se reencontraban con el público. "Estamos muy nerviosas porque es el primer concierto que damos en esta gira y los nervios siempre están, pero a las dos o tres canciones se van", decía Encarna en declaraciones a los medios.
En esta velada tan especial, las cantantes estuvieron acompañadas por sus allegados, que son su apoyo incondicional tanto en el terreno personal como en el profesional. "Esta noche tenían que estar porque los necesitábamos. Estamos pasando un momento triste", aseguraba Toñi. Y es que la artista revela que su abandono voluntario de Supervivientes les ha traído consecuencias con las que no contaban. "No somos personas de estar en el foco mediático y eso nos tiene desbordadas. Lo hemos pasado muy mal y nuestra familia también", reconocía.
Nada más regresar de Honduras, las hermanas se encontraron con el enfado de Jorge Javier Vázquez. El presentador del reality aseguró sentirse "decepcionado" con ambas. "Vuestro abandono ha sido premeditado, superficial y poco profesional. Habéis demostrado una gran falta de respeto hacia el trabajo de muchas personas de esta cadena. Ya no sois personas gratas en Mediaset", aseguraba. Desde entonces ni Toñi ni Encarna participan en las galas de Supervivientes.
"Ha sido injusto. De una cosa pequeña se ha hecho un mundo y se ha exagerado todo. El paso por el reality y lo que pasó con el programa yo creo que no fue para para tanto. Las cosas se hablan, equivocarse no es un delito", comentaba Toñi, que al volver del concurso se encontró también con que habían robado en su domicilio, un delito que, tal y como ha explicado, sigue investigándose.
"Está la Policía con ello, me han prohibido hablar, pero yo tengo todavía el susto en el cuerpo", decía. "No es nada agradable que entren y toquen tus cosas, pero yo ya me he mudado. Me he cogido otra casa y ahora estoy poniendo rejas. Soy muy miedosa y me han quedado muchas secuelas con el robo, ahora tengo pánico", reconocía.
)
)
)
)
)
)
)
)
)
