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Desde hace semanas se viene diciendo que la relación entre Irina Shayk y Bradley Cooper no está atravesando su mejor momento, sin embargo, no ha sido hasta ahora cuando los rumores han cobrado más fuerza, acaparando titulares de importantes medios internacionales. Según ha confirmado una fuente cercana al portal Page Six, la espectacular modelo, de 33 años, y la estrella de Hollywood, de 44, están viviendo una importante crisis y podrían anunciar su ruptura de manera inminente. "Por su hija, lo sigue intentando", ha dicho la citada fuente, añadiendo que: "Las cosas no están bien. Ninguno de los dos es feliz. La relación pende de un hilo".
A finales del año pasado, fue también Page Six el medio que se hizo eco de los problemas que estaban atravesando Irina y Bradley. "Son infelices. Lo han estado intentando durante meses", afirmó una fuente. De hecho, la pareja fue vista mientras disfrutaban de una cena y un testigo aseguró que no se les veía bien: "Apenas se hablaron". Ahora las cosas podrían haberse complicado y ya no habría marcha atrás, de hecho, varios medios aseguran que es ella la que quiere terminar con la relación.
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La última vez que les vimos juntos en un evento público fue el 24 de febrero, cuando desfilaron por la alfombra roja de la 91º edición de los premios Oscar acompañados de la madre del actor, Gloria Campano Cooper. Risas, complicidad... la pareja se deshizo en gestos de cariño ante los fotógrafos, sin dar pista alguna de lo que podría estar pasando entre ellos. Precisamente fue esa misma noche, después de ver la química que Bradley derrochó con Lady Gaga sobre el escenario de los Oscar, al interpretar Shallow, el tema principal de la película que protagonizan, Ha nacido una estrella, cuando empezaron las especulaciones. Sin embargo, la cantante quiso dar por zanjado el tema asegurando que no había surgido nada entre ellos más allá de la pantalla: "La gente vio amor, ¿y sabes qué? Eso es precisamente lo que queríamos que vieran", aseguró Gaga.
El tema siguió dando mucho que hablar y las especulaciones aumentaron el 6 de mayo, cuando la top rusa acudió en solitario a la Met Gala. A finales de ese mismo mes, reaparecieron juntos paseando con su hija Lea de Seine, que el pasado mes de marzo cumplió dos años, por las calles de Los Ángeles (California). Muy seria y sin intercambiar palabra, la modelo intentó pasar desapercibida con una gorra oscura y maxi gafas de sol, mientras que el actor, que también iba con gorra, llevaba a su pequeña en brazos.
Fue en la primavera de 2015, cuando se pudieron ver en la exclusiva mundial de la revista ¡HOLA! las primeras imágenes de la modelo rusa y el actor estadounidense. Desde entonces, han formado una de las parejas más atractivas de Hollywood viviendo con discreción su historia de amor. En diciembre de 2016, la pareja se convirtió en el centro de todas las miradas por un posible compromiso. Las alarmas saltaron cuando la modelo rusa lució un impresionante anillo con una esmeralda y diamantes que podría haberle regalado el protagonista de El lado bueno de las cosas para dar un paso más en su relación, aunque ninguno de los dos se pronunció al respecto. La pareja disfruta de su vida familiar con su niña, a la que colman de arrumacos en cada una de sus apariciones.
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