La noche arrancaba en Supervivientes con Chelo, Isabel, Lidia y Violeta nominadas. Las concursantes se enfrentaron a la decisión de la audiencia que, por segunda semana consecutiva, salvó a Isabel Pantoja de la expulsión del próximo jueves. Una noticia ante la que la artista rompía a llorar de la emoción, aunque más tarde volvió a pedir al programa que le permitiera regresar a España: "He pedido al capitán Morgan la carta de renuncia porque necesito estar con los míos. Mi participación aquí ha dejado de tener sentido. Necesito estar en mi casa, con mi gente y con mi madre. No quiero perder ni un día más de estar con ella". A pesar de todo, tras reflexionar un par de minutos vía telefónica con Carlos Sobera y después de que su hija Isa le mandase un bonito mensaje de ánimo, la cantante decidió continuar con su aventura. "Si la gente quiere que aguante una semana más, lo voy a hacer. Pero esto es muy difícil. Muchísimas gracias a toda la audiencia que me ha vuelto a salvar", decía.
Uno de los motivos que podrían haber llevado a la artista a querer abandonar de nuevo es la tensa situación que tanto ella, como el resto de los concursantes, viven en Cayo Paloma. Las constantes órdenes de Colate han provocado varias discusiones, especialmente por la comida y el racionamiento impuesto por el empresario. Algo que ha provocado que Omar Montes se alíe con la cantante. Incluso Mónica Hoyos ha tenido alguna que otra mala contestación con el ex de Paulina Rubio.
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Por otro lado, Violeta y Fabio continúan celebrando su romance. Para el cumpleaños del argentino, el programa regaló una noche romántica a la pareja, que disfrutó de una suculenta cena. "Ha sido el cumpleaños más lindo de todos. Este anillo te lo regalo para que te acuerdes de este momento siempre", decía. Sin embargo, la situación con el resto de sus compañeros no es la idónea. Después de la fortísima discusión que protagonizó con Carlos Lozano, la valenciana ha tenido un importante desencuentro con Dakota. "No podéis levantaros a las 12. Yo me levanto a las 5 de la mañana y pesco a las 9, que es una hora prudente en la que no hace calor y todavía hay pesca", decía Mangriñán a Dakota, Oto y Lidia. "Me levantaré cuando me apetezca… Cómo se nota la nominación. La cogía y la ahogaba en el mar. Fabio, vaya disgusto le vas a dar a tu madre con esta. Guapita, que a nadie le caes bien. Por eso te han nominado", contestaba ella.
Carlos Lozano, por su parte, está contento en el palafito. Aun así, el presentador está convencido de que sus compañeros no hacen nada y que sus formas son las correctas. "Hacen más bien poco. Se lo han tomado de otra forma. Yo me levanto cuando amanece y me acuesto cuando el sol se pone. Ellos no lo sienten así y yo no lo voy a criticar. Si se aburren que se vayan a su casa. Yo me enfado cuando les veo", decía antes de que se emitiese un nuevo vídeo en el que volvía a bajar a la playa Cabeza de León y sacaba de quicio a sus habitantes: "Por las buenas soy muy bueno y por las malas soy muy malo".
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