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Sólo hay que ver a Vicky Martín Berrocal para comprobar que está pletórica de felicidad. Desde que hiciese pública su historia de amor con el empresario portugués João Viegas Soares, la pareja ya no se esconde y vive su relación con naturalidad y sin miedos. Aunque él reside en Portugal y ella en España, la distancia no es un problema y casi todos los fines de semana viajan para estar juntos. Este fin de semana, el luso ha viajado a Madrid para reencontrarse con su chica, con la que ha hecho diferentes planes con amigos.
De esta forma, el pasado viernes, la pareja era fotografiada de camino a un conocido restaurante de la capital, situado en la calle Jorge Juan de Madrid. Con las manos entrelazadas y demostrando que lo suyo va viento en popa, llegaban muy sonrientes a su reunión.
La sevillana escogía para la ocasión un look en blanco y negro compuesto por pantalones de cuero, camiseta básica blanca con mensaje y americana negra que combinó con amplios pendientes de aro en color dorado. Llamaba especialmente la atención el accesorio que lucía en su mano, pues parece que con él la diseñadora está intentando dejar de fumar. El portugués, por su parte, escogía un traje color crema con camisa de rayas verticales rojas y blancas.
Ya en la terraza del local, Vicky y Joao se sentaron a la mesa con otra conocida pareja, la formada por Mar Flores y Elías Sacal. Ambas relaciones tienen mucho en común, pues viven sus romances en la distancia aunque siempre hagan todo lo posible por verse en algún punto del mundo para disfrutar de su amor. Al mexicano y la madrileña pudimos verles al día siguiente en la hípica, donde derrocharon complicidad tras darse una nueva oportunidad después de que el pasado mes de febrero la también modelo anunciase su ruptura a la revista ¡HOLA!.
Los cuatro comensales pudieron degustar algunos de los platos tradicionales de este restaurante, que destaca también por la cuidada presentación de su recetario asturiano. Entre gastronomía y maridaje, ambas parejas charlaron y disfrutaron de un una reunión que se alargó hasta la madrugada y a la que se sumaron otros amigos con el paso de la horas. También se pudieron ver los gestos de cariño que se dedicaron a lo largo de la noche, en la que no faltaron los besos.
No era la primera visita del portugués a la capital. Recientemente, el empresario vino a Madrid con su familia para estar con la diseñadora, un reencuentro muy especial al que también se unieron Alba y su novio, Javier Calle. "Ha sido de los findes más divertidos de mi vida", comentaba la joven en su Instagram tras la visita de João Viegas Soares.
Vicky, de 46 años, es muy discreta con su vida personal, pero en mayo de 2018 ya contó que había conocido a alguien muy especial. "Hay alguien ahí y puede ser definitivo", decía para sorpresa de los reporteros. "Yo nunca había hablado de boda y no estoy hablando de boda, pero tengo la sensación de que puede ser él", añadía, por lo que el "sí, quiero" puede estar cada día más cerca.
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