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Ya están sobre el escenario las propuestas para el festival de Eurovisión y en los ensayos se han visto sonidos y escenografía para todos los gustos: baladas, música electrónica, escenarios minimalistas, otros simbólicos, e incluso ¡rompedores! Los artistas explotan sus puntos fuertes de cara a conseguir los votos de los eurofans, que se preparan para el gran día. Haciendo un repaso a la lista de aspirantes, destacamos algunos que, por su voz, puesta en escena o apuesta estética, podrían dar mucho que hablar en la carrera hacia la final (eso sí, el montaje podría variar en directo). ¿Estás de acuerdo?
Con un espectáculo minimalista, consistente en una especie de alto andamio sobre el que se sienta la intérprete, se presenta Dinamarca. Leonora Colmor mira desde lo alto al público y desgrana las notas de Love is forever, hasta que un par de bailarines se sientan junto a ella. Tiene solo 20 años y ha sido una conocida campeona juvenial de patinaje sobre hielo. Ahora, aunque sigue practicando este deporte, se ha enfocado en su pasión por la música.
Finlandia sube al escenario un cubo gigante que refleja impresionantes imágenes, convirtiendo el número de Darude en un vistoso juego de luces y colores. Dentro del cubo se esconde uno de los músicos, a quien acompaña, en la parte superior, una bailarina que se mueve al son de Look away. Reconocido y premiado DJ y productor, Darude se ha convertido en una figura de éxito en clubes y festivales de medio mundo.
La propuesta más atrevida, una de ellas al menos, viene de la mano de los islandeses Hatari. El grupo, que apenas comenzó su andadura en directo 2017, ha sido elegido como uno de los mejores del país. Su rock potente se acompaña de una puesta en escena idéntica, lo que ha provocado ya no pocos comentarios por su estética. El tema se titula Hatrið mun sigra.
Con trajes regionales, llenos de color y con el aval de haber producido una versión folk del tema Enjoy the silence, de Depeche Mode, se presenta el grupo Tulia. Las componentes que representarán a Polonia suben al escenario de Tel Aviv el tema Fire of love (Pali się), una mezcla de sonidos tradicionales y modernos que resulta diferente e interesante.
Su estética no deja indiferente. Hace un par de años Portugal conquistó el certamen con una balada inusual y un carismático artista. Amar pelos dois se convirtió en un hit en la voz de Salvador Sobral y dio la vuelta al mundo. Ahora Conan Osíris quiere hacer lo mismo. Su tema Telemóveis no solo toca de cerca una cuestión de plena actualidad, el uso de las nuevas tecnologías, sino que llega rodeado por una puesta en escena extravagante y llena de fantasía.
Lo que comenzó como una invitación se ha convertido en una participación permanente. Australia se “cuela” de nuevo en las semifinales del certamen de Eurovisión con uno de esos números de “magia” que encanta a los eurofans. Un enorme andamio, parece eso al menos, eleva a Kate Miller-Heidke, mientras se proyectan sobre su falda relajantes imágenes. Completa la puesta en escena una bailarina aérea que hace piruetas al son de la música de Zero Gravity. El título es más que adecuado, desde luego...
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