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"Feliz cumpleaños. Lo eres todo para nosotros. Te queremos muchísimo". Con esta frase, que lo dice todo, Victoria Beckham felicitaba a su marido David Beckham en el día de su 44 cumpleaños. La diseñadora dedicaba este emotivo y romántico mensaje al exjugador junto a una significativa instantánea. En ella, la excomponente de las Spice Girls agarra con fuerza la mano del que fuera futbolista del Real Madrid, luciendo uno de los 14 anillos de compromiso que David le ha regalado durante sus dos décadas de matrimonio. En concreto se trata de la sexta pieza con la que obsequió a Victoria, un diamante corte esmeralda y tres bandas de oro amarillo. Un romántico detalle para una celebración por todo lo alto en la que no estuvieron solos.
© @Victoria BeckhamLejos de tratarse de un encuentro para dos, David y Victoria disfrutaron de tan señalada fecha junto a sus cuatro hijos, Brooklyn, Romeo, Cruz y Harper, así como de los padres del homenajeado, David Edward Beckham y Sandra Georgina West. La familia al completo se desplazaba a un conocido restaurante de Londres donde no faltaron ni los exclusivos regalos ni la tradicional y suculenta tarta de chocolate que, como mostró la propia Victoria, su hija Harper se encargó de llevar a la mesa mientras todos los presentes le cantaban el tradicional Cumpleaños feliz.
© @victoriabeckhamAdemás de las muestras de amor de los suyos, David recibió un buen número de regalos que Victoria enseñó a sus seguidores. Junto con las originales y divertidas tarjetas de sus hijos, el exjugador disfrutó de un suculento sándwich de salchichas hecho para la ocasión por su hija Harper y lujosas sorpresas como una elegante maleta personalizada con sus iniciales, y otros más de andar por casa, como el desodorante que recibió por parte de su esposa Victoria, y que, como el mismo protagonista mostró, fue un regalo que le dejó algo pensativo: "Puede que se lo pidiera".
© GtresonlineDavid definió la celebración como un "cumpleaños perfecto". Horas antes de su día, el atractivo deportista cumplía con uno de sus compromisos profesionales al participar en una sesión fotográfica a las afueras de la capital inglesa. Lo más destacado de este trabajo es que, entre los miembros del equipo, se encontraba su hijo Brooklyn que aportó su granito como fotógrafo durante el 'shooting'.
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