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El Oporto CF ya había confirmado a través de un comunicado que su portero se encuentraba "bien" y "estable", pero el propio Iker Casillas ha querido tranquilizar a sus seguidores compartiendo una imagen en el hospital en la que se le puede ver sonriente y con muy buen aspecto después de haber sufrido esta mañana un infarto de miocardio que provocó su ingreso urgente. El futbolista no ha querido esperar a que le den el alta para agradecer todos los mensajes de ánimo que ha ido recibiendo a lo largo del día y dejar claro que, a pesar del susto, siguen con las fuerzas intactas. Su esposa, Sara Carbonero, ya se encuentra a su lado en el centro hospitalario CUF de Oporto.
© @ikercasillas"Todo controlado por aquí. Un susto grande pero con las fuerzas intactas. Muchísimas gracias a todos por los mensajes y el cariño", escribió el campeón del mundo junto a la imagen en la que posa con el dedo pulgar hacía arriba celebrando su rápida recuperación. Sara, que conocía la noticia mientras estaba en Tarifa por motivos laborales, ya se encuentra en la ciudad portuguesa acompañando a su marido en estos difíciles momentos que parece estar superando a pasos agigantados.
© @saracarboneroLa periodista también ha querido compartir con sus seguidores que todo ha salido bien y lo ha hecho con una fotografía junto a la cama de Iker en la que mientras el futbolista hace el símbolo de la victoria con los dedos, ella le acaricia cariñosamente la cabeza. En otra fotografía, muestra un primer plano de sus manos entrelazadas y respira aliviada porque "todo ha quedado en un susto". "Como dice una buena amiga la vida tiene esa extraña manera de recordarte que hay que celebrar cada latido", escribía la toledana tras agradecer también los mensajes de ánimo recibidos.
Personalidades del deporte, el espectáculo e incluso la política se han preocupado por el estado de salud de Iker y tras conocer la noticias no han dejado de enviarle todo su apoyo a través de las redes sociales. Según ha explicado el club en un comunicado, el futbolista comenzó encontrarse mal tras un entranamiento rutinario y tras examinarle los médicos del equipo decidieron trasladarlo al hospital, que confirmó que se trataba de un infarto y le practicaron un cateterismo. Tras la intervención, y a juzgar, por las fotografías el guardamenta evoluciona favorablemente.
