Después de una semana sin actividad, Alejandra Rubio ha regresado a su 'vblog', The Black Sheep, publicando un vídeo muy personal en su exitoso canal de Mtmad. La joven, que ha compartido algunos de los detalles más importantes de su vida en esta plataforma 2.0, ha querido hacer partícipes a sus seguidores de uno de sus secretos mejor guardados: el significado de sus tatuajes. Alejandra, que ha añadido un nuevo 'tattoo' a su cuerpo, ha aprovechado la ocasión para hablar de los mensajes y recuerdos que guarda en su piel desde su adolescencia. Una edad muy temprana que, según cuenta la propia protagonista pasado el tiempo, hubiera preferido retrasar: "Me llevo tatuando desde que soy muy pequeña, desde los 14 años. Debería haber esperado un poco, pero como soy tan impulsiva con todo al final empecé muy pronto".
Aunque algunos de ellos, como asegura, preferiría no habérselos hecho, lo cierto es que la hija de Terelu Campos se siente muy orgullosa de la simbología que decora su piel. Como era de esperar, las personas más queridas de su vida tienen hueco en su colección en forma de iniciales: "Uno que tengo en la muñeca derecha es una L de mi tía Leli que falleció, una T por mi madre y por mi abuela, una S por mi hermano y un A por mi padre". Su madre, la mujer más importante para ella, tiene además un hueco destacado en el brazo izquierdo: "Tengo un sol y una luna que me lo hice por mi madre y es porque siempre hemos sido como la noche y el día y me hice el sol por ella y la luna por mí". Ambas comparten admiración por el mismo artista, que también se encuentra en el mapa de su piel: "Enrique Bunbury es mi artista favorito y el de mi madre también, me tatué el título de la canción Lady Blue porque fue una canción que ayudó mucho a mi madre cuando estaba mal y porque dice cosas tan bonitas".
Como era de esperar, su novio, Álvaro Cano (Lobo) cobra una gran relevancia en diferentes partes de su cuerpo, antes incluso de haberse conocido, una curiosa coincidencia que Alejandra recuerda con mucho cariño: "Me tatué un lobo que, curiosamente me lo hice antes de conocer a Álvaro (dos años antes). Siempre me han gustado los lobos porque simbolizan la familia, siempre van en manada y lo acompañé de la palabra 'Deus' que significa Dios, porque soy creyente". Tras el 'tattoo' premonitorio llegaron los que ambos se realizaron en pareja y de los que también se siente muy orgullosa.
Junto con estos recuerdos, los aspectos más destacados de su personalidad se han convertido en varios tatuajes muy importantes para ella: "Junto a la calavera de mi muñeca tengo una daga, representa una mujer fuerte y por eso me lo hice... Justo más arriba tengo inscrita la palabra Destiny o destino, y es porque he sido siempre una mujer que piensa que todo pasa por algo y todo lo malo trae algo bueno". Alejandra, se considera a sí misma una mujer rebelde y lo ha querido reflejar en su cuerpo: "Tengo puesta la palabra 'rebeldía' en inglés por varias razones: Primero porque fue un libro que me marcó mucho al leerlo y dos porque siempre he sido rebelde. Pero no en el sentido de me emborracho, me voy de juerga o no hacer caso a mis padres… Para eso siempre he sido una niña súper buena".
En un recuento interminable y junto a símbolos como el ojo que todo lo ve, el lazo rosa de la lucha contra el cáncer o el título de su vídeo blog y 'leitmotiv' de vida The Black Sheep, Alejandra añadió un nuevo dibujo con mensaje inspirado en su filósofo favorito Nietzsche: "Desarrolló la teoría del eterno retorno, que asegura que el ser humano vuelve a sentir constantemente las mismas alegrías y dolores ya que el mundo finaliza, se quema y vuelve a renacer. Solo el superhombre puede desear el eterno retorno y me lo tatué porque creo que soy muy feliz con mi vida y no me importaría vivir una y mil veces".
Finalmente quiso dedicar un recuerdo muy especial a Beatriz, la esposa de su padre Alejandro Rubio, tristemente fallecida: "Tengo tatuado en la nuca nombre de la mujer de mi padre que falleció, mi Bea. Nunca me arrepentiré de habérmelo hecho, me dolió muchísimo, pero me encanta".