“Donde sea y cuando sea, pero siempre juntos, no hay otra opción. Love”, dice David Muñoz a Cristina Pedroche junto a una bonita imagen de ellos en la que aparecen abrazados. La siguiente parada de su eterna luna de miel ha sido Nueva York, un viaje que se suma a su álbum “Pedrochos on tour” en el que van recopilando cada una de sus escapadas. Cristina Pedroche y David Muñoz aprovechan cada hueco de sus apretadas agendas para disfrutar, tal y como asegura la colaboradora de Zapeando. “Vacaciones de amor. Vacaciones para descansar. Vacaciones para aprender. Vacaciones para asimilar. Pero en definitiva...vacaciones, como siempre, juntos”.
Siguendo su verdadera pasión, como es la gastronomía, no perdieron la oportunidad de ir a comer al restaurante del chef estadounidense Dan Barber, el Blue Hill at Stone Barns. El pasado año Barber fue reconocido por sus colegas cocineros como el mejor chef del mundo durante la gala de The World's 50 Best Restaurants con el Chefs' Choice Award 2018 celebrada en Bilbao y no había mejor plan para la pareja que ir a probar sus deliciosos manjares.
La primera parada de su ruta fue el Blue Hill at Stone Barns, ubicado a cincuenta kilómetros de Nueva York, un lugar que reinventa el concepto de restaurante acercando el contacto con el producto y todo lo que lo rodea hasta la mismísima mesa. Dan Barber aprovecha cada uno de los recursos que le ofrece la propia explotación que acoge el establecimiento, desde ovejas, cerdos, pavos, gansos, pollos, gallinas, abejas, árboles frutales, los pastos o los campos de cultivo. Los productos de temporada más frescos y aquellos que han sido recolectados durante el mismo día son los que se sirven en el plato. Una experiencia única para cualquier paladar exigente como es el de este reconocido chef cuyo restaurante Diverxo es el único en Madrid que posee tres estrellas MIchelin. "Flipando fuerte", dice David Muñoz mientras recorre los maravillosos parajes de esta explotación agrícola y se toma un vino del Ródano. Siguiendo su ruta gastronómica, la pareja también visitó Momofoku, del prestigioso cocinero David Chang, en el East Village neoyorquino.
Por su parte, Cristina Pedroche tambien ha hecho gala de sus gustos y aficiones y no ha dejado de plasmar algunas instantes que le han sorprendido durante un día de compras por Nueva York como un maniquí practicando una postura de yoga, uno de los deportes que ella practica, o las simpáticas ardillas que poblan los parques de la Gran Manzana y que se acercan a los viandantes que les ofrecen comida. Su escapada a la ciudad de los rascacielos no ha hecho más que comenzar, tan solo llevan unas horas en la ciudad, y la aventua continúa en la ciudad que nunca duerme y que podría ser el siguiente objetivo profesional de David Muñoz.