Judit Mascó y Eduardo Vicente han celebrado este fin de semana la mayoría de edad de su hija Romita. El matrimonio se fue a cenar con la joven, como reflejan las imágenes que la modelo ha compartido en sus redes sociales. "Mano a mano sólo con ella. Una cena de lujo para la ocasión", escribió. El lugar elegido para esta reunión familiar fue el restaurante BLANC by Carme Ruscalleda, del Hotel Mandarin Barcelona, ubicado en el Paseo de Gracia de la Ciudad Condal. Judit y Eduardo no podían ocultar su felicidad mientras Romita soplaba las velas de su tarta.
La modelo y el abogado se casaron en 1993 con la idea de formar una gran familia, y, desde luego, lo han conseguido. "Me encanta ser madre de familia numerosa", ha dicho Judit en más de una ocasión. La mayor de las niñas es María, nacida en 1998; le sigue de cerca Paula, nacida en 2000; después, Romita, a la que adoptaron en febrero de 2003, y, por último, Clara, que está a punto de cumplir 13 años. "Cuando eres madre, lo único que quieres es que sean felices. Ellas, por ahora, no han mostrado interés en ser modelos. Lo único que me gustaría es que, lo que decidan hacer, lo puedan hacer y que eso les haga felices, que es lo que yo hice", ha declarado la top cuando le han preguntado si le gustaría que sus hijas fueran modelos.
A principios de año vimos a Judit con sus tres hijas mayores sobre la alfombra roja de los Premios Gaudí. María, la primogénita del matrimonio entre Judit Mascó y Eduardo Vicente, demostró que está al tanto de las últimas tendencias al optar por un vestido de estampado de serpiente con cuello perkins. Por su parte, Paula lució un favorecedor wrap dress satinado en tono rojo de Zara -disponible en la web por 39,95 euros- y su hermana Romita optó por combinar un sencillo mono negro con una capa efecto peluche a contraste. Tan solo faltó Clara, la pequeña de la familia.
Aunque María ha mostrado cierto interés por el mundo de moda, los pasos de la joven van encaminados hacia otra profesión. "Cuando veo a María en un reportaje, tengo dos opiniones, la profesional (no puedo evitarlo) y la personal. Profesionalmente, sabemos que María es muy fotogénica, sabe posar con naturalidad y se siente a gusto. Y, como madre, se me cae la baba…", confesó Judit en ¡HOLA!. "No quiere la repercusión mediática que conlleva este trabajo, no es a lo que quiere dedicarse, y no solo lo respeto, sino que, aunque esporádicamente haga algunos trabajos de modelo, yo la apoyaré siempre en lo que le haga feliz", aclaró la top.