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Le conocimos en el año 2000 al convertirse en uno de los primeros habitantes de la casa de Gran Hermano, pero a pesar de ser uno de los concursantes más queridos por el púlico, decidió alejarse del foco mediático. Hablamos del ourensano Israel Pita quien, tras conocer los sinsabores de la fama, cambió radicalmente de vida y hoy es celador en un hospital de Málaga. Según ha contado en La Voz de Galicia, del programa guarda buenos recuerdos, de hecho, su historia de amor con la concursante, Silvia Casado, cautivó a la audencia. Se enamoraron locamente y, tras la expulsión del gallego, la malagueña decidió abandonar la casa para reencontrarse con él. Fruto de su relación, nació Hugo en 2003, pero su romance no llegó a buen puerto y un año después de convertirse en padres sus caminos se separaron. Pero Israel no se arrpiente de nada porque gracias a su pasado disfruta de un presente de ensueño.
"Cuando terminé con María Teresa Campos en Telecinco (fue colaborador del programa Día a Día) quise dejarlo y venir a Málaga para estar con mi hijo. Ahora estoy trabajando como celador en un quirófano de una clínica privada en Málaga. Llegué aquí gracias a eso", ha revelado en una sincera entrevista concedida a dicha publicación. En la actualidad, es feliz al lado de Sandra Rodríguez, con quien tiene una niña, Mía, de casi un año. "Mi vida ha cambiado totalmente y la que tengo ahora me gusta mucho", ha confesado.
Antes de entrar en Gran Hermano, Israel hacía prácticas como celador junto a su madre en el servicio de urgencias del Hospital de Ourense. Lo que vino después del concurso fue "muy heavy", según ha recordado. "Tuve guardaespaldas durante seis meses, no podíamos ir a ningún sitio. Fuimos como los Rolling Stones, recuerdo que mis padres tenían que cambiar de teléfono asiduamente. Tenía mensajes subidos de tono de todas partes de España e incluso pintadas en la pared de mi casa", ha señalado el gallego, a quien también vimos concursando en Hotel Glam, junto con Dinio, Pocholo, Yurena o Yola Berrocal. El único obstáculo de su paso por la pequeña pantalla ha sido encontrar "un trabajo normal", de hecho, "en este trabajo, en el que llevo ya diez años, vine de la mano de mi mujer, que es enfermera", ha revelado.
Israel y Sandra se casaron el 17 de julio de 2010 y el próximo 12 de abril celebrarán el segundo cumpleaños de su hija Mía. Hacen una pareja extraordinaria y el gallego no duda en hablar así de su familia en las redes sociales: "Asegúrate de tener un buen copiloto en la vida, al fin y al cabo ella va a ser la que te ponga la música. Te quiero. Gracias, Sandra por hacerme el papi más feliz del mundo desde hace ya dos años. Mía es lo mejor que nos ha pasado... Y gracias Hugo por ser el hijo que eres".
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