La reprimenda de Irene Rosales a Kiko Rivera por su actitud dentro de la casa

La sevillana no quiere que su marido se agobie innecesariamente dentro de la casa por el bien de los dos

Por Gtresonline

La relación entre Kiko Rivera e Irene Rosales en GH Dúo no es tan perfecta como parece. El largo encierro comienza a pasar factura a su matrimonio y, en las últimas semanas, la buena sintonía que había entre ellos se ha visto resentida. Las rivalidades entre ambos se están haciendo cada vez más evidentes, sobre todo después de que hace unos días protagonizaran una sonada discusión en la que el hijo de Isabel Pantoja recriminara a su esposa que le levantara la voz delante de todos sus compañeros. Una incómoda escena que ha vuelto a repetirse recientemente y en la que la sevillana se ha visto obligada a intervenir por el bien de la pareja.

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El Dj acusa el agotamiento de permanecer ya más de dos meses entre las paredes de la casa de Guadalix de la Sierra y aprovecha cualquier situación para desahogarse con sus compañeros. "Estoy cansado de estar aquí. Quiero llegar a lo más lejos, pero quiero que acabe ya", le comentaba en una conversación privada a Antonio Tejado. Una actitud que, según Irene, se repite en demasiadas ocasiones y que no le gusta en absoluto. "Siempre estas agobiado y cuando estoy contigo me lo transmites a mi también. Y te lo vuelvo a repetir, prefiero el agobio de estar aquí al que tuviste hace 6 meses", le manifestó en referencia a la depresión que padeció el año pasado.

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El escenario tampoco es fácil para la joven, pero ella intenta no contagiarse por la negatividad de su marido. "Estamos aquí los dos por lo mismo. Esto nos cuesta trabajo a todos, uno lo expresa de una manera y otro de otra, pero no podemos entrar en un bucle", se quejaba la joven ante la presencia de Carolina Sobe y María Jesús Ruiz, quienes no dudaron en darle la razón. "Él se marca límites y una persona no tiene que marcarse límites tiene que dejarse llevar y hasta donde llegues, llegaste", explicaba a sus amigas.

Sin embargo, Kiko piensa que su mujer no le deja expresar lo que siente, algo que ella se encargó en dejarle claro que no era así: “No es que no quiera escucharte, pero lo que no quiero es que entres en un bucle. Intenta evitar esas conversaciones. ¿Sabes la suerte que tenemos de estar juntos aquí?". "¿Y tú puedes entender que yo tenga días malos?", intentaba defenderse el artista. Irene considera que lamentarse todo el día y mantener determinadas conversaciones lo único que hacen es retroalimentar su angustia, lo que no hace otra cosa que perjudicarles en el concurso.

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"Yo estoy haciendo un esfuerzo por estar aquí. Y también he descubierto cosas que han estado hablando que me dan mucho coraje, como que nosotros tenemos más ventajas que otros por estar aquí y eso no es verdad. Todo el mundo ha entrado en pareja y yo no tengo ningún tipo de ventaja respecto a nadie, y eso me consume. Es verdad que tenemos que intentar apoyarnos un poquito más y necesito tu apoyo como el que más", confesó el intérprete de así soy yo, antes de zanjar el tema con un beso y un abrazo.