La posibilidad de que Kiko Rivera tuviera que salir temporalmente de la casa de GH Dúo se planteaba días atrás. El hijo de Isabel Pantoja tendría que asistir el próximo lunes 25 de febrero a declarar en calidad de testigo a favor de su madre por la demanda que la tonadillera interpuso a las que fueran sus amigas Raquel y Bibiana, más conocidas como 'Las Mellis'. No obstante, se acaba de conocer que, finalmente, el dj no tendrá que abandonar durante unas horas Guadalix de la Sierra, tal y como aseguraba en primicia la periodista Beatriz Cortázar en El Programa de Ana Rosa.
"El magistrado que lleva el caso ha decidido no retrasar la fecha del juicio, pero como es un procedimiento civil sí se permite en diligencia final, después de que se celebre la vista del lunes, que Kiko vaya otro día en solitario a testificar. Por lo tanto, no se va a hacer una resolución de este caso hasta que Kiko pueda declarar", informaba la colaboradora del espacio de las mañanas de Telecinco.
El artista aplazará su cita con la justicia hasta que finalice su estancia en el 'reality'. Un aspecto muy positivo para él puesto que, junto a su mujer, Irene Rosales, forman una de las parejas favoritas del público para alzarse como vencedores. Una opinión con la que, según Cortázar, también coinciden sus seres queridos: "La familia Pantoja no quiere que Kiko salga de la casa porque considera que lo está haciendo muy bien y no quieren desconcentrarle del concurso y como la ley se lo permite declarará más adelante".
De esta manera, Kiko no seguirá los pasos de su esposa, quien por motivos muy distintos se vio obligada a abandonar durante varios días el programa. La sevillana sufrió un aborto natural por lo que tuvo que ser hospitalizada pero, afortunadamente se recuperó en poco tiempo y volvió a reunirse con su marido para seguir luchando por el premio. Un dinero que, según ellos mismos aseguraron, les ayudará a saldar sus deudas.
En caso de haber tenido que salir de la casa temporalmente, el autor de Así soy yo no sería el primer concursante que tiene que abandonar el concurso para cumplir con la justicia. Su compañera María Jesús Ruiz tuvo que interrumpir su participación en Supervivientes 2018 para cumplir con una orden judicial que la obligaba a regresar a España desde Honduras para comparecer como testigo en el juicio contra su expareja, José María Gil Silgado, por supuestos malos tratos. También Aurah Ruiz se vio obligada a ausentarse en dos ocasiones de la última edición de Gran Hermano VIP por sus problemas judiciales con el futbolista Jesé por la custodia de su hijo en común.