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Han pasado dos décadas desde que Mario Vaquerizo y Alaska se dieran el sí quiero por primera vez en Las Vegas, una ceremonia que volvieron a repetir hace diez años. En todo este tiempo la relación de los dos artistas ha sido una de las más estables y admiradas del panorama social nacional. Este año, sin embargo, está siendo algo más duro para ambos debido a la artrosis degenerativa, enfermedad que padece el líder de las Nancys Rubias y que, como es lógico en estos casos, ha afectado de algún modo en el día a día de la pareja. Así lo confirmaba Alaska durante su visita al programa El Hormiguero 3.0 de Pablo Motos: “Mario está recuperándose. Tiene una cosa para toda la vida que son los achaques de la edad. Vaya, lo de la espalda. Así que está con la rehabilitación y tendrá que empezar a hacer pilates y tendrá que controlar los movimientos”.
Así, la intérprete de Espectacular describía con todo lujo de detalles los pasos que, desde que le diagnosticaran la enfermedad a su marido, tendrá que seguir a pies juntillas para sentirse mejor, incluso en el trabajo: "Ya le he dicho que tendrá que entrenar antes de salir al escenario con las Nancys Rubias. "¡Hombre de Dios como vas a salir así a lo loco!".
Abierta y sincera como siempre, la cantante no tuvo inconveniente en desvelar de qué manera ha incidido la dolencia de Mario en su esfera más íntima: "Sí, ha perdido el apetito sexual. Sí, aquí entre tú y yo, está como para tocarlo. Está todo el rato como rígido y no apetece mucho. Pero no tiene importancia". La ‘diva de los 80’ aprovechaba la ocasión para hacer una pequeña gran crítica a su marido haciendo gala, como no, del gran sentido del humor que le caracteriza: "Es muy mal enfermo porque se desespera. Aunque es cierto que aguanta muy bien el dolor. Pero sí es de estos que dicen 'Nunca voy a volver a ser el que era'. Lo ha pasado muy mal porque por primera vez en la vida ha sentido que tiene algo que no puede controlar".
Alaska dejó muy claro que, de cara al futuro, Mario tendrá que unirse a ella a la hora de ser más cuidadoso con su salud. Un reto en que tendrá que invertir tiempo y un poco de esfuerzo: "Ahora tendrá que hacer lo que hago yo que tengo una hernia y tengo escoliosis… y tendrá que hacer pilates y rehabilitación… Tiene que cuidarse".
Aunque Pablo Motos se mostró realmente preocupado por el estado de salud de su gran amigo, lo cierto es que, el conductor del afamado programa se quedó más tranquilo después de hacerle una pregunta clave a su invitada: "¿Pero, ha dejado de beber cerveza?". La rápida respuesta de Alaska consiguió arrancar sonrisas entre el equipo de Motos y el público del programa: "No ha dejado de beber cerveza, así que no está tan mal". Una vez aclarado este asunto, Alaska siguió divirtiéndose junto a su gran amigo y disfrutó de la presencia de las populares hormigas Trancas y Barrancas disfrazadas de los electroduendes de La Bola de Cristal.
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