Desde prácticamente los inicios del concurso, Miriam Saavedra se convirtió en la clara favorita para ganar la sexta edición de Gran Hermano VIP, como finalmente ha ocurrido. La llegada tardía de la 'princesa Inca' a la Casa de Guadalix de la Sierra, con Mónica Hoyos dentro del 'reality' desde hacía unos días, volvió a desatar la guerra entre las dos ex de Carlos Lozano. Durante los casi tres meses de convivencia que pasaron juntas, ambas protagonizaron tensos encuentros que dividieron aún más la opinión del público. Tras la expulsión de la que fuera azafata de El precio justo a las puertas de la final, Mónica empezó a defenderse a sí misma en los diferentes programas a los que acudió, enfrentándose a todos los colaboradores, e incluso, a Jorge Javier Vázquez, alegando que desde Mediaset habían amañado el concurso para hacer ganadora a su eterna rival.
Anoche, durante la 'gran final', no hubo sorpresas con los finalistas. Sin embargo, mientras el resto de concursantes expulsados acudieron a apoyar a la ganadora, Mónica Hoyos decidió ausentarse de plató para no tener que ver a Miriam recoger el maletín. "Feliz noche a todos menos a Mónica Hoyos: allá donde estés, te recordaremos siempre", decía Jorge nada más comenzar la gala. Unas palabras que recuerdan a las que dedicó a Oriana Marzoli tras abandonar el 'reality' a tan solo 48 horas del arranque del GH VIP 2018; desde entonces, y tras el veto impuesto por el presentador, la venezolana no ha vuelto a pisar un plató de Telecinco.
La noticia de su ausencia no se conoció hasta el final. Sin embargo, a punto de terminar el programa Sálvame Diario se habló de la posibilidad de que Mónica Hoyos no acudiese a la gala de Gran Hermano VIP, pues a tan solo dos horas de la gala, aún no había confirmado su asistencia. Algo que criticaron duramente algunos colaboradores, como Lydia Lozano, que se mostró muy enfadada y lanzó un crítico mensaje a la peruana mientras miraba directamente a cámara: "Me parecería alucinante que no fueses, Mónica Hoyos. Estás siendo una desagradecida con la productora del programa, con la gente que te ha ahí fuera, con la gente que ha estado ahí apoyándote... Todos queremos ver la cara que se te queda cuando digan el nombre de Miriam como ganadora".
"Defiendo mi concurso, entiendo perfectamente que a la gente le guste más una persona u otra o que esta chica tenga firmado un contrato con vosotros y que haya que defenderla", decía hace tan solo unos días la peruana, mientras abandonaba las instalaciones de Mediaset, tras su paso por El Programa de Ana Rosa, donde también se vio las caras con Joaquín Pratt, quien aseguró que, a diferencia de ella, Miriam había concursado "sin rencor y sin venganza".
El enfado de Mónica fue incrementándose poco a poco y sus palabras no quedaron ahí. Tras lo vivido el miércoles en Ana Rosa y las críticas que recibió ayer tarde en Sálvame, la peruana quiso lanzar un mensaje claro y contundente a través de su Instagram Stories: "Es muy fácil, en un programa que es tuyo, sentirte cómodo para decir lo que quieras. Es muy fácil dar la vuelta a los vídeos para desprestigiar un concurso. Es muy fácil unirte a lo que todos dicen para un aplauso, y encima preparado... Todo eso es fácil. Lo difícil es mantenerte y seguir hacia adelante, ¡¡que es el único sitio hacia donde sé ir!".