Ángela Ponce es uno de los nombres más buscados de la semana. A pesar de no haber podido alzarse con el galardón de Miss Universo 2018, la modelo, que es la primera mujer transgénero en competir por la ansiada corona, ha marcado un antes y un después dentro del concurso de belleza. Tanto es así que después de ser eliminada y no ser elegida entre las 20 semifinalistas en la gala final celebrada en Bangkok (Tailandia), Ángela recibió un bonito homenaje por parte de la organización por su valentía. Ahora, en su regreso a Madrid, la sevillana no ha dudado en hablar con la agencia Gtres, con quien se ha mostrado más emocionada y feliz que nunca.
"Me siento muy contenta con el trabajo que he hecho en Tailandia. He dado todo lo que he podido y vengo con esa tranquilidad. También estoy muy contenta de haber vuelto a España, que tenía muchas ganas", explica la andaluza momentos después de aterrizar en el aeropuerto de la capital. "He vivido una experiencia única y que no todo el mundo tiene la oportunidad de disfrutar. Me siento privilegiada de haber podido compartir esto con 95 compañeras de 95 países distintos y 95 culturas diferentes", continúa la representante española del certamen, que asegura que se ha llevado bien con todas las candidatas a Miss Universo. "Hay alguna con la que coincides más y alguna con la que coincides menos, pero buena relación he tenido con todas", asegura Ponce, quien precisamente lleva en las manos un peluche que le ha regalado Miss China.
Sin embargo, a pesar de haber conseguido cumplir uno de sus grandes sueños, la modelo ha tenido que derribar numerosos muros hasta alcanzar su objetivo. "Opiniones hay muchas. Opiniones buenas, opiniones malas y opiniones que vienen del desconocimiento, pero también hay muchas que son fruto del aburrimiento. Soy Miss España, acabo de venir de Miss Universo, me lo he pasado muy bien y he vivido la experiencia más bonita de mi vida", reivindica la activista, quien no está dispuesta a que los comentarios negativos de sus detractores ensombrezcan su momento de oro.
A pesar de que la representante española defendió a la perfección su candidatura, finalmente se cumplieron las apuestas y Catriona Gray se coronó como Miss Universo 2018. Desde el primer momento, la filipina, quien respaldó su candidatura mostrando su compromiso social y ganas de trabajar con los más pobres, en referencia a las barriadas en Manila, contó con el apoyo del público congregado en Bangkok para presenciar la gala.