En septiembre, multitud de medios especializados aseguraban que Henry Cavill, quien ha interpretado el papel de Clark Kent/Superman en las películas de Warner El hombre de acero, Batman vs Superman y La liga de la justicia, colgaba su capa. El actor estadounidense mantuvo el misterio y la productora se negó a dar más datos sobre lo ocurrido, por lo que muchos fans interpretaron que había llegado el momento de despedirse del actor en su papel más mainstream. Sin embargo, ahora Jason Momoa, que estrena Aquaman el próximo 21 de diciembre, asegura que nada está más lejos de la realidad. "Acabo de hablar con él y en absoluto ha terminado con el papel", ha respondido a Entertainment Tonight en la premiere de su película.
"Adora el personaje, no lo va a dejar. Cien por cien", insistía el actor, conocido a nivel mundial por su papel de Khal Drogo en Juego de Tronos. Sin embargo, a pesar de su seguridad a la hora de decir que Henry Cavill seguirá interpretando al mítico personaje, ni Warner Bros ni el propio intérprete han dado más detalles.
La segunda película de la Liga de la Justicia, que estaba originalmente planeada para 2019, no solo se ha retrasado sino que quizás nunca llegue a ocurrir. Por el momento, el film autotitulado sobre el héroe acuático protagonizada por Jason Momoa y la segunda parte de Wonder Woman en 2020 son los únicos que se esperan de DC Cómics y Warner, que parecen estar triunfando más en el ámbito televisivo. De hecho, es en las series de la cadena estadounidense CW (disponibles en HBO) Arrow, The Flash y Supergirl, entre otras, cuando hemos visto más a los superhéroes que compiten con los de Marvel y ahí hemos conocido a otro hombre de acero: el interpretado por Tyler Hoechlin.
Varios factores complicaron la continuidad de la saga, como la baja recaudación de la primera película de La liga de la Justicia, los problemas de Ben Affleck o el cambio de directores (Snyder abandonó el proyecto en mayo de 2017 antes de que se terminara el filme y fue Joss Whedon quien retomó la posproducción). Mientras tanto, el ascenso y éxito de las películas de Marvel- que incluso están nominadas a los premios más importantes de la industria- no hace más que aumentar la exigencia.