La reacción de Mariló Montero a las disculpas de Pablo Iglesias
El líder de Podemos se retractó por unas bromas machistas que hizo en 2014 sobre la periodista
Este jueves Pablo Iglesias aprovechó su comparecencia en la comisión de investigación sobre la financiación de los partidos políticas en el Senado para disculparse por unos desafortunados comentarios que realizó en 2014 en un chat privado sobre la presentadora Mariló Montero. Sin embargo, para la navarra las palabras del líder de la formación morada no son todo lo sinceras que ella desearía. Según ha explicado en el programa de radio Más de Uno, “Las disculpas no significan lo mismo que el perdón. Disculparse de algo significa que no sientes lo que has hecho y perdón es que te arrepientes de algo que reconocer haber hecho”.
Fue en agosto de 2014 cuando Pablo Iglesias, a través de un chat privado de Telegram con la cúpula de Podemos, escribió sobre la entonces presentadora de La mañana de La 1 que "la azotaría hasta que sangrase". Unos comentarios que difundió el medio Okdiario en 2016 y de los que, cuatro años después, ha querido retractarse, aunque no de la manera adecuada para la aludida. “Él ha elegido bien el pedir disculpas y ha evitado el perdón”, ha rematado Mariló.
Pablo Iglesias se disculpó durante la comisión de investigación sobre la financiación de los partidos en respuesta a una pregunta de un senador popular en la que hacía alusión al episodio. "Siento muchísima vergüenza de haber hecho, aunque fuera en un grupo privado, una broma machista imperdonable. A veces he hecho comentarios que cuando lees después dices: es impresentable. Ahí lo que uno puede hacer es pedir disculpas y decir: Lo siento mucho. Esto lo hice mal", señaló durante su intervención.
Además de los polémicos comentarios, lo que realmente ha ofendido a Mariló ha sido “la falta de respeto que ha tenido hacia mí el señor Iglesias que nunca accedió a darme una entrevista”. Además, ha lamentado que después de que aquellas palabras salieran a la luz “nadie o casi nadie salió en mi defensa en un momento en el que el MeToo estaba en plena efervescencia”, sí lo hizo su exmarido Carlos Herrera, que aunque admitió que se tratan de unas palabras realizadas en un contexto privado y no exentas de ironía, creía que eran necesarias unas verdaderas disculpas. En su momento, la periodista denunció el comentario en el Instituto de la Mujer, ya que según aseguró, se veía en “la responsabilidad” de difundir su caso a nivel social “para que ninguna mujer tolere ese tipo de aberraciones”.