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Estamos de vacaciones porque la temporada ya ha terminado y, en un principio, no nos volvemos a ir a China". Así de rotunda se mostró anoche Malena Costa sobre su futuro más próximo. "Yo no me quiero ir tan lejos, espero que podamos quedarnos por aquí cerca", añadió la modelo durante los premios Hombres GQ del Año 2018. Malena, que estaba espectacular con un vestido negro de SisTwin, zapatos de Aquazzura y bolso de Teria Yabar, acudió a la fiesta del brazo de Mario Suárez, con quien tiene dos hijos, Matilda, de dos años, y Mario, de uno. Aunque la experiencia en el país asiático ha sido muy enriquecedora, la pareja no tiene intención de seguir viviendo tan lejos de sus familiares. Sin embargo, todavía no saben qué les deparará el destino. "No sé nada sobre posibles fichajes porque acaba de terminar. Hasta que no le salgan las opciones yo ni le pregunto, la verdad. Yo pienso que estoy aquí y que estoy feliz", dijo Malena.
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Mario Suárez fichó por el Guizhou Hengfeng Zhicheng en julio de 2017. Según Malena, "al principio es todo muy bonito, pero luego se empieza a hacer un poco más pesado porque yo soy muy de estar aquí con mi gente y trabajar". La modelo, de 29 años, reconoció que su estancia en China no ha sido un camino de rosas. "Es todo tan diferente... echaba de menos a mi familia, a mi perro, ir a cenar donde quisiera... Hubo días duros, pero todo te sirve para ser mas fuerte y para valorar hasta el más mínimo detalle de lo que uno tiene", confesó.
La pareja piensa ya en las Navidades, unas fechas que pasarán en familia entre Madrid y Mallorca. En lo que no piensan todavía es en ampliar la familia. "Por ahora no, dan mucho trabajo, no paran", comentó. "La maternidad es difícil, aunque también tiene momentos muy bonitos. Hay días en los que quieres llegar a todo y no puedes, y otros, como que te levantas con mejor pie, y todo va más rodado", concluyó.
