"-James, me acaban de preguntar si quiero decorar la Casa Blanca. -Oh, por Dios. Cuelga el teléfono. Es una broma pesada. -No, no. Creo que es en serio". Con esta conversación empieza la historia que James Costos, embajador de Estados Unidos en España durante la presidencia de Barack Obama. El diplomático ha presentado su libro El amigo americano, en el que narra junto al escritor y periodista peruano Santiago Roncagliolo sus vivencias en la etapa en la que ejerció de representante de su país en España. Arropado por diversas personalidades y grandes amigos, James Costos presentó la obra en la Casa de América de Madrid.
Simoneta Gómez-Acebo, prima del rey Felipe VI; la diseñadora, Ágatha Ruiz de la Prada; la política y portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Madrid, Begoña Villacís; el príncipe Kostantin de Bulgaria y, su mujer, Maria García de la Rasilla; o Plácido Arango y su pareja, la escultora Cristina Iglesias, han sido algunos de los rostros conocidos que no han querido perderse este encuentro y charla con 'el hombre de Obama en España'. Por supuesto, en este importante día tampoco faltó su marido, el diseñador de interiores Michael Smith, quien recibió aquella llamada que puso punto y final al James Costos ejecutivo de HBO y arquetipo del self-made man para marcar el inicio de una nueva era de la diplomacia estadounidense.
Cercano, talentoso, comprometido con sus causas y tremendamente activo en el acercamiento de Estados Unidos y España, Costos ha revelado cómo supo ir a contracorriente y romper las rígidas barreras del protocolo diplomático, dinamizando con su contagioso y transformador espíritu todos los ámbitos de su embajada.
Desde agosto de 2013 hasta enero del 2017, James Costos ocupó el cargo de Embajador de los Estados Unidos en España y Andorra. Durante su etapa diplomática, que terminó con la llegada de Donald Trump a la presidencia estadounidense, convirtió su residencia en Madrid en un punto de encuentro para emprendedores, empresarios, comunicadores y representantes del mundo del arte y la cultura.
Aunque ya han pasado cerca de dos años desde que dejó de ser embajador de Estados Unidos en nuestro país, los lazos de James Costos con España siguen siendo igual de estrechos. Él y su marido suelen pasar sus vacaciones -tanto de verano como de invierno- en Mallorca desde hace una década, motivo por el que se les hizo entrega el año pasado del galardón "embajador de Mallorca en todo el mundo". Este verano su refugio balear ha sido el lugar de vacaciones de una invitada muy especial: Michelle Obama.