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En 2016, Tina Turner fue diagnosticada con cáncer intestinal, una enfermedad que terminó acarreándole más problemas de los esperados. Los efectos secundarios del tratamiento tradicional la llevaron a probar remedios homeopáticos que resultaron peores aún para su salud y le causaron un fallo total de riñón. "Las consecuencias de mi ignorancia me pusieron entre la espada y la pared", escribe la artista en su nueva autobiografía, My Love Story, donde ha revelado algunos detalles de su vida profesional, amorosa y mucho más.
© Gtresonline"En este terrible momento de culpa y autoreproche me di cuenta de algo maravilloso de Erwin", explica la cantante haciendo referencia a su actual marido, Erwin Bach, con quien se casó en 2013 tras 26 años de relación. "Él nunca me echó en cara mi error. Al contrario, fue leal, amable, y comprensivo. Además, estaba decidido a ayudarme a salir con vida de esto". En el momento crítico, el esposo de Tina se ofreció para ser el donante de riñón que la artista necesitaba. "Me preguntaba si alguien pensaría que la donación era una transacción. Sería increíble, pero a pesar del tiempo que llevamos juntos hay gente que sigue pensando que se casó conmigo por la fama y el dinero", revela con sinceridad. "¿Qué querría si no un hombre de una mujer mayor? Él siempre ignoró los rumores", añade. El alemán tiene actualmente 62 años, 17 menos que la intérprete de What’s Love Got To Do With It.
© Getty ImagesEl trasplante de riñón tuvo lugar en abril de 2017 y fue un éxito, pero Tina aún tiene las complicaciones habituales en estos casos. Junto a su marido, a quien conoció en 1985, sigue luchando por su salud y ha olvidado los malos momentos junto a Ike Turner, el que fuera su primer esposo. "Viví un matrimonio infernal que casi me destruye, pero seguí adelante. Sé que mi adventura con mi salud no ha terminado, pero sigo aquí. Seguimos juntos y más cerca de lo que me hubiera imaginado. Miro atrás y entiendo mi karma. Lo bueno salió de lo malo. La alegría salió del dolor. Nunca he sido tan feliz como soy a día de hoy".
El pasado mes de julio hallaron muerto a Craig Turner, hijo mayor de Tina, fruto de su relación con Raymond Hill. Tenía solo 18 años cuando le tuvo y, tras su boda con Ike Turner, le adoptó. Tenía 59 años cuando fue encontrado en su casa de Los Ángeles con un tiro en la cabeza, una muerte que fue más tarde calificada como suicidio.
