No pudo ser, ni Antonio Banderas ni Penélope Cruz se llevaron el Emmy
La noche más agridulce para los intérpretes españoles en la 70ª edición de los Premios Emmy
Penélope Cruz y Antonio Banderas son, probablemente, los mejores representantes del cine español en el extranjero. Anoche, durante la 70ª edición de los Premios Emmy, los intérpretes tenían todas las papeletas para añadir a sus estanterías un nuevo trofeo. Sin embargo, la suerte no quiso acompañar a los españoles, que terminaron abandonando la gala sin el codiciado galardón. Ella, nominada a Mejor Actriz Secundaria de Miniseries por su papel de Donatella Versace en American Crime Story: The Assassination of Gianni Versace; él, a Mejor Actor por interpretar a su paisano Pablo Picasso en Genius: Picasso. Los actores se vistieron con sus mejores galas y estuvieron acompañados en todo momento por sus parejas, que intentaron ejercer como sus mejores amuletos en un día tan especial. De nada sirvió, Merritt Wever por su interpretación en Godless y Darren Criss, que dio vida en la ficción al asesino de Gianni Versace, terminaron imponiéndose.
La actriz de Alcobendas acudió al Microsoft Theater de Los Ángeles, al que asistió por primera vez como nominada a un Emmy, con un espectacular vestido de Alta Costura firmado por Chanel, maison de la que es embajadora. Un diseño de palabra de honor y amplia caída con el que la musa de Almodóvar se vistió de princesa y consiguió convertirse en una de las mejor vestidas de la velada. Según la edición norteamericana de Harper's Bazaar, el vestido está confeccionado en tul, seda y con alrededor de 8.000 plumas y cuentas iridiscentes. Un trabajo para el que se necesitaron más de 280 horas de trabajo y que hizo que Penélope brillase como nunca.
Javier Bardem acompañó a su mujer en su gran noche y, aunque siguieron su "política" de no posar juntos en la alfombra roja, dentro del teatro se sentaron al lado y se mostraron cómplices en todo momento. "Esto es un regalo", decía el actor a AFP. "El que está nominado está muy tranquilo y los que estamos alrededor, más nerviosos".
Quienes no tuvieron ningún tipo de problema a la hora de compartir plano fueron Antonio Banderas y Nicole Kimpel, espectacular con un diseño de Lorenzo Caprile. Besos, abrazos y miradas que lo decían todo. La pareja se mostró más unida que nunca en la noche de los Emmy, donde el malagueño era uno de los grandes favoritos. También para su exmujer y madre de su hija Stella del Carmen, Melanie Griffith, que al conocerse la noticia de su nominación quiso apoyar al actor desde las redes sociales: "Tienes mi voto". Este premio habría supuesto un reconocimiento muy especial para el actor, ya que este papel, en el que ha tenido el honor de interpretar al reconocido pintor español, era uno de los más importantes de su carrera. "Me ofrecieron este personaje cuando tenía 20 y 30 años, pero siempre dije no: 'No quiero jugar con él todavía. Lo admiro demasiado'. Era mi ídolo desde que era un niño", decía en una entrevista para The Hollywood Reporter.