Tenían ganas, muchas ganas de iniciar su luna de miel y, por fin, ese momento ha llegado y lo ha hecho casi un mes y medio después de darse el 'sí, quiero' en El Escorial y en la misma semana en la que se conocía la separación matrimonial de Kiko Matamoros y Makoke tras dos décadas juntos. Diego Matamoros y Estela Grande ya disfrutan del tradicional viaje de novios que sigue a cualquier boda que se precie y el primero de los destinos que han elegido ha sido, ni más ni menos, que Dubái, un lugar en el que los paisajes variopintos se alternan y uno puede ver rascacielos, desierto y lujosas piscinas en un radio de tan sólo unos cuantos kilómetros a la redonda.
Así fue la romántica boda de Diego Matamoros y Estela Grande en Madrid
"Destino: Disfrutar y amar", escribía hace apenas dos días el hermano de Laura M. Flores en sus redes sociales junto a una imagen en el aeropuerto con las maletas en las manos y listo para pasarlo bien. Daba así Diego Matamoros el pistoletazo de salida a su ansiado viaje, el mismo que le ha llevado a aterrizar con un "bomboncito", tal y como su ya esposa le ha definido mientras posaban en lo alto del Burj Khalifa, el rascacielos de 828 metros de altura que está considerado la estructura más alta de la que se tiene registro en la historia. Allí, desde lo alto "del mundo", según el propio Matamoros, ha compartido con todos sus seguidores la felicidad que siente en estos instantes.
"Si la felicidad se midiese de alguna forma, esta podría ser una!", ha comentado junto a una imagen en la que aparece mientras observa Dubai desde las alturas. Una experiencia, sin duda, que le ha encantado, a juzgar por la cantidad de fotografías que se han tomado en el lugar. Un día después, el paisaje cambiaba radicalmente y la pareja ponía rumbo hacia el desierto de Dubái. "Safari salvaje", escribía Diego Matamoros, quien hacía público todo un book fotográfico de su paso por el desierto, cámara de fotos en mano incluida.
Durante esta primera parada de su luna de miel, el matrimonio está disfrutando mucho de su viaje, aunque también pasando mucho calor, tal y como Diego y Estela revelan en sus redes sociales. También han descansado en la piscina del hotel y han podido visitar algunos de los restaurantes más exclusivos de la zona, como Al Dawaar, ubicado en el hotel Hyatt -en el casco antiguo- y que es el único lounge giratorio de la azotea de Dubái. Está situado en el piso 25 y tiene forma circular. Además, va girando lentamente mientras los comensales degustan los excelentes platos, por lo que proporciona una panorámica visión de 360 grados de la ciudad.
Mientras la pareja continúa con su escapada postnupcial, las cosas en España no están mucho mejor para la familia de Diego. Su padre, Kiko Matamoros, anunció recientemente su separación a escasos días de la celebración de su segundo aniversario de boda. Diego Matamoros no se ha pronunciado al respecto por el momento, y todo apunta a que no lo hará, al menos mientras dura su luna de miel. Aún se desconoce cuál será la siguiente parada de su viaje, pero a buen seguro que el matrimonio mantendrá puntualmente informados a todos sus seguidores.