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El fin de su relación con Paula Echevarría ha sido uno de lo momentos más complicados en la vida de David Bustamante. Sin embargo, transcurrido ya más de un año de su distanciamiento y tan solo unos días después de obtener la sentencia oficial del divorcio, el cantante se ha enfrentado a otra separación, aunque esta vez 2.0. A pesar de que el antiguo matrimonio intentó que su núcleo más cercano no se viera afectado por su situación particular -puesto que compartían el mismo círculo de amigos- su ruptura se ha cobrado su primera 'víctima colateral'. Se trata nada menos que de uno de sus íntimos, Javier Castillo, más conocido como 'Poty', al que el cántabro ha dejado de seguir en las redes sociales.
Aunque se desconocen los motivos oficiales de esta repentina decisión, el popular coreógrafo, que hasta el momento se había mantenido neutral, ha tratado de no conceder demasiada atención al asunto alegando al medio digital LOOK que es algo que "no tiene ninguna importancia y no hay que darle más de la que tiene". De hecho, tal y como se ha podido comprobar, no ha correspondido al gesto con un 'unfollow' al intérprete de Dos hombres y un destino. Este, por su parte, ha preferido guardar silencio y no se ha manifestado de manera pública al respecto.
Desde que se conocieran en 2001 durante la primera edición de Operación Triunfo, donde el joven músico era uno de los concursantes y el bailarín ejercía como profesor en la Academia, ambos se convirtieron en inseparables. Una amistad que prosperó con el paso de los años y que también se extendió a sus respectivas parejas. De este modo, la esposa de 'Poty', María Isabel Navarro (a la que Bustamante también ha excluido de sus redes) llegó a convertirse en una de las mejores amigas de la protagonista de Velvet y forma parte de su pandilla, a la que bautizaron como 'Las Pencas'.
Las dos parejas han compartido inolvidables momentos juntos y realizado una gran cantidad de escapadas, tanto al interior de España como al extranjero. Una de ellas fue la que protagonizaron en París en otoño de 2013, un divertido viaje en el que se les pudo ver visitando los monumentos más importantes de la capital francesa y posando en grupo para inmortalizar aquellos días felices.
Asimismo, los dos amigos dieron numerosas muestras de su unión a través de muchas publicaciones en Instagram con las que dejaban ver su complicidad ante sus seguidores. Incluso, Javier fue uno de los pilares en los que el artista de 35 años se apoyó en sus momentos más complicados tras su separación, dejándose ver juntos cuando el cantante recogía a su hija Daniella del colegio. Unos instantes que se desconoce si volverán a repetirse en el futuro.
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