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Las altas temperaturas invitan a las 'celebs' a subirse a bordo de sus lujosos yates y disfrutar de agradables jornadas náuticas en familia y con amigos. La reina de la telerrealidad estadounidense, Kim Kardashian, no podía ser menos, por eso, y aunque ella en realidad no sea propietaria de ninguno, ha aprovechado el buen tiempo para reunirse con su 'squad' de amigos y surcar en una impresionante embarcación las aguas de Miami. Junto a ella, además del propietario del barco, el magnate estadounidense Dave Grutman, viajaron dos de sus mejores amigos, Jonathan Cheban y Larsa Pippen. Con ellos también disfrutaron los pequeños North y Saint West, con quienes se deshizo en mimos en numerosos momentos.
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En lo que al outfit de la estrella de la televisión se refiere, destaca el particular 'traje de baño' que escogió para la ocasión. Un 'jumpsuit' superajustado de color rosa fucsia, ‘tirante espagueti’ y corte ‘ciclista’ que realzaba sus despampanantes curvas. Una pieza muy propia del estilo de las hermanas Kardashian firmada por la prestigiosa 'maison' francesa capitaneada por Karl Lagerfeld, Chanel.
Su hija North, que ya tiene cinco añitos, iba conjuntada con su influyente madre, y lució una falda-pantalón del mismo color que el del mono de esta, combinado con la parte de arriba de un bikini amarillo. Este juego de colores complementarios resaltó todavía más su color de piel.
Saint no subió a tomar el sol con Kim, su hermana y sus amigos, sin embargo, la estrella no se olvidó de compartir imágenes y vídeos de su bebé de dos años en su cuenta de Instagram. Allí, vestido como un marinerito, gorra incluida, el pequeño demostró ser un auténtico seguidor de la música de su padre. "¡Es papi!", contestaba al ser preguntado por Kim sobre la canción que sonaba de fondo, interpretada por el rapero Kanye West.
Pero además de compartir algunos de los momentos que vivió con sus amigos durante su paseo recreativo, Kim Kardashian también aprovechó para hacerse 'selfies', algunos de los cuales compartió más tarde en su perfil. También fue protagonista de una inesperada sesión de fotos, donde junto a sus mejores amigos posó como si de la imagen de presentación de la nueva temporada de Keeping up with the Kardashian se tratara.
De quien no hubo ningún rastro fotográfico en esta jornada marinera fue de la pequeña Chicago, quien puede que debido a su corta edad, tuviese que permanecer en tierra firme a cuidado de algún familiar y no salir a disfrutar de esta divertida travesía náutica.