"Hola a tod@s! No quería comentar nada sobre las últimas noticias, porque la verdad es que simplemente ha sido una anécdota más de la vida a la que no quería darle demasiada importancia. Pero debido a la gran cantidad de medios que se han hecho eco de la noticia, adjuntando las impactantes fotografías del accidente y por tanto la preocupación de mucha gente me decido a escribir estas palabras aquí". Así comienza el mensaje que Miguel Ángel Muñoz ha publicado en sus redes sociales para contar su propia versión del accidente de tráfico que sufrió hace unos días en Ibiza. El actor ha querido compartir con todos sus seguidores cómo ocurrió todo exactamente y ha aprovechado para dar las gracias a los cuerpos de seguridad y personal sanitario por el trabajo que hicieron, a pesar de que, según sus propias palabras, "solo fue un susto grande".
"Muchas gracias por todos los mensajes con tantos buenos deseos y energía. Por suerte todos los implicados no sufrieron lesiones grandes a pesar de lo aparatoso que fue el accidente. En mi caso, el que menos. Ya que estaba parado, recién aparcado, aún dentro del coche y tras el primer impacto solo fue un susto grande y una sensación difícil de explicar por aquí mientras acontecía atónito a lo que veía a través de la ventana de mi coche", relata el protagonista de Sin Identidad.
- PRIMICIA: Miguel Ángel Muñoz sufre un pequeño accidente de tráfico en Ibiza
"Por suerte los daños físicos no se corresponden con las imágenes de los vehículos y después del protocolo necesario desde el momento del accidente hasta el alta del hospital, ni siquiera teníamos que llevar el collarín. Muy agradecido a la policía de Ibiza, a los bomberos, al equipo de médicos y enfermeras del Hospital del Rosario que nos cuidaron muchísimo e hicieron un trabajo excepcional. A parte de sacarnos más de una sonrisa a todos los que estábamos allí. También a Perico, Iris y María por su ayuda", continua el mensaje que ha compartido en sus redes, donde ha querido mandar un mensaje lleno de significado: "La vida es increíble y puede que en menos de un minuto todo de un giro de 180 grados para cambiar de rumbo, pero siempre hay que ver lo positivo. Por suerte tardamos en salir del coche y así pudimos vivir esta experiencia para contarla y aprender lo importante que es tomar consciencia de la atención al volante. Tuvimos mucha suerte todos! Así que hay que estar feliz y sonreír a la vida incluso cuando te ponen un collarín!".