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Ha pasado mucho tiempo, concretamente siete años, desde que Shakira no se encontraba con su público madrileño. La cantante aterrizó en la capital española para subirse al escenario del WiZink Center, donde la esperaban más de 14.000 personas que estaban deseando cantar sus canciones y disfrutar de su espectáculo en directo. "¡Gracias por esperarme, Madrid!", dijo emocionada la artista, que vivió una noche de sentimientos encontrados. Y es que a pesar de lo contenta que estaba, al mismo tiempo recibió una triste noticia: la eliminación de su Selección en el Mundial de Fútbol de Rusia. El equipo colombiano no pudo imponerse a Inglaterra y terminaron perdiendo en los penaltis, algo que, sin duda, apenó a Shakira, que ha animado a su equipo desde la distancia como la que más.
"Impresionante Colombia en este Mundial... Creo que el mundo entero sabe que merecíamos ganar! Orgullosa por siempre de mi país!!!", escribió la artista en sus redes sociales tras el concierto. A pesar de todo, la cantante de Barranquilla no dejó que la derrota empañara el concierto y se entregó a sus fans, ofreciendo un concierto de casi dos horas en el que cantó algunas de sus canciones míticas, además de varios temas de 'El Dorado', el álbum de mayor repercusión de su carrera en la última década gracias a temas tan pegadizas como La bicicleta, Chantaje o Me enamoré.
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Recuperada de la hemorragia en las cuerdas vocales que en noviembre le hizo retrasar la gira El Dorado World Tour y que provocó la preocupación de sus seguidores más incondicionales por la continuidad de su carrera, Shakira reconoció que: "Pensé que no volvería a cantar nunca más, pero los milagros existen y si estoy aquí es por ustedes". Visiblemente emocionada, la cantante dijo: "Qué bonito volver a verlos de nuevo ¡y tan cerca! Los extrañaba tanto... Muchas gracias por estar aquí, gracias por hacerme tan feliz... ¡me encanta estar de vuelta!".
Feliz de estar en Madrid de nuevo y sin dejar de moverse sobre el escenario, la artista de Barranquilla se cambió varias veces de vestuario y sorprendió al mezclarse entre el público, que se volvió eufórico. Loba, Suerte, Nada, Perro fiel, Inevitable, Hips don't lie... pero fue con el tema Amarillo cuando mostró orgullosa el reverso de su guitarra, donde llevaba impresa la foto de su pareja, el futbolista del FC Barcelona Gerard Piqué, y sus dos hijos, Milan y Sasha. "¡El de Madrid es el mejor público del mundo!", gritó Shakira, que con las canciones mundialistas La La La y Waka Waka convirtió el tramo final del concierto en una fiesta por todo lo alto.
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