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Cuando ya han transcurrido varios días, la considerada como boda del año sigue generando multitud de titulares. El enlace real entre el príncipe Harry y Meghan Markle fue un destacado acontecimiento que pasará a la historia por muchos motivos. Una unión matrimonial muy distinta a lo que se suele acostumbrar en las Casa Reales, por lo que multitud de personas de todo el mundo quisieron ser testigos de primera mano de un evento de esas características. Conscientes de la expectación generada, los propios novios quisieron tener un bonito detalle invitando a los jardines de Windsor a 1.200 ciudadanos pertenecientes a distintos colectivos de la sociedad inglesa a los que, además, obsequiaron con un bonito recuerdo.
Se trataba de una bolsa conmemorativa en la que muchos han visto una peculiar manera de ‘hacer caja’, poniéndola a la venta tan solo 24 horas después de la cita a través de diversas plataformas de subasta online. Sin duda, todo un objeto de deseo para muchos fans acérrimos de la pareja que han llegado a pujar por ella hasta 4.500 euros en eBay. No obstante, también se pueden encontrar ofertas más moderadas, a partir de 130 euros, para todos aquellos interesados en guardar un recuerdo imborrable de esta historia de amor. Para algunos vendedores, “una oportunidad única en la vida de poseer una pieza de la historia de Gran Bretaña”.
Pero, ¿qué contiene este kit nupcial que lo convierte en algo tan codiciado? Confeccionada en yute y con las iniciales de la pareja inscritas en azul, junto a la fecha y el lugar del enlace, la bolsa lleva en su interior una moneda de chocolate gigante, una lata de galletas de mantequilla, una botella de agua, un imán, un vale del 20% de descuento para la tienda del castillo de Windsor, un plano de situación y un programa para seguir la boda al detalle. Artículos, puede que poco costosos en sí mismos, pero con un elevado valor sentimental para algunas personas que ven en Harry y Meghan los protagonistas de un cuento de hadas hecho realidad.
Un lote de regalos muy prácticos con el que los Duques de Sussex quisieron corresponder al cariño del pueblo y hacer más llevadera la espera a todos aquellos que pasaron largas horas de a las puertas del castillo para compartir con ellos su felicidad y que siguieron la ceremonia desde pantallas gigantes ubicadas en los terrenos aledaños. Sin duda, un día histórico que tardarán mucho tiempo en olvidar.
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