Lo que acertaron las apuestas (y lo que no) sobre el 'look' de belleza de Meghan Markle

Serge Normant, amigo de la novia desde hace años, ha elaborado el recogido. El maquillaje ha sido obra de Daniel Martin, que suele trabajar con Priyanka Chopra y Olivia Palermo

por Regina Navarro

Si algo ha generado la boda del príncipe Harry y Meghan Markle, además de expectación, han sido rumores, sobre todo en lo que al look de la novia se refiere. Entre los nombres más sonados una larga lista de diseñadores en la que se colaban Victoria Beckham, Erdem, Roland Mouret o Sarah aunque Ralph & Russo parecían los más sólidos. Finalmente, Clare Waight Keller, la primera directora artística de Givenchy, ha tenido el privilegio de crear este vestido histórico. Pero no ha sido lo único sobre lo que se ha hablado. A solo tres semanas del enlace, el nombre del estilista Miguel Pérez, el peluquero de Amal Clooney, copaba los titulares de varios medios británicos y estadounidenses que aseguraban que él peinaría a la novia porque, tal y como explicaba The Sun, había trabajado con Meghan desde que se mudó a Londres. Las apuestas tampoco han acertado en este aspecto ya que, desde la Casa Real, han desvelado que Serge Normant, amigo de Meghan desde hace años, se ha encargado de elaborar su recogido. El maquillaje, por su parte, ha sido obra de Daniel Martin, Dior Brand Ambassador, que suele trabajar con frecuencia con Jessica Alba, Priyanka Chopra e incluso Olivia Palermo.

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El maquillaje

Siempre Meghan ha aparecido en un acto oficial ha lucido un maquillaje sencillo, sin excesos y muy sutil. Un look lleno de naturalidad por el que también ha apostado en el día de su boda. Para la base su maquillador, Daniel Martin, ha optado por una ligera y poco cubriente que dejaba entrever algunas de sus pecas, su seña de identidad. Y ha dado calidez al rostro con un ligero blush rosado, el mismo tono con el que ha maquillado sus labios. Aunque es el color en el que suele lucirlos, el protocolo dicta que no se debe aplicar un labial oscuro sobre ellos, motivo por el que la duquesa de Cambridge tampoco utiliza esas tonalidades. 

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Los ojos, quizá, es donde ha habido alguna concesión más. Para las sombras el maquillador ha optado por tonos tierra, más oscuros en la zona de las pestañas y más ligeros conforme se acercaban a las cejas, hasta terminar con un punto de luz bajo el arco de las mismas. Quizá lo que más ha sorprendido del look de belleza de Meghan ha sido un ligerísimo eyeliner para potenciar, aún más, su mirada.

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El recogido

Aunque en declaraciones a Hola.com el estilista español Miguel Pérez, de quien se especuló que podría encargarse de peinar a la novia, aseguró que le dejaría el pelo suelto para la ceremonia y se lo recogería para la fiesta, Meghan ha optado por seguir la tradición y sostener su cabello en un peinado sencillo y elegante elaborado por Serge Normant, que cuenta entre sus clientas con Julia Roberts, a la que peinó en la edición de 2016 de Festival de Cannes. También fue el encargado de crear la espectacular melena que Sarah Jessica Parker lució en la última gala de MET.

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Para la novia el estilista ha creado moño bajo trenzado al que ha añadido cierto desenfado al optar por un acabado messy y dejando, estratégicamente, algunos mechones sueltos bordeando su rostro, dándole un aire mucho más fresco y juvenil. Sobre el peinado, ha lucido un velo de cinco metros de largo, confeccionado con tul de seda y con flores bordadas, una -la más representativa de la flora de la zona- por cada uno de los 53 países que configuran la Commonwealth. Para sujetarlo ha optado por la tiara 'bandeau' de diamantes que perteneció a la reina Mary.

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La manicura

Tal y como había predicho Hola.com en uno de sus artículos, la novia ha seguido el protocolo que exige la Casa Real Británica y que nunca se saltan la duquesa de Cambridge e Isabel II, eligiendo un tono muy natural, a medio camino entre rosa y nude. Aunque la marca del esmalte no ha trascendido, podría tratarse del favorito de la Reina, de la firma essie en el tono Ballet Slippers. Un color que lleva utilizando 30 años. La duquesa de Cambridge, aunque también suele elegir a la firma para decorar sus manos, lo hace con Allure, con un matiz ligeramente más luminoso. En cualquier caso, y como sucede con el maquillaje de los labios, el protocolo marca que las mujeres de la Casa Real no deben colorear sus uñas con tonos llamativos e intensos que se alejen de la paleta de los pastel más clásicos.