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Hoy es el gran día para los aficionados del Atlético de Madrid, que verán cómo su equipo disputa en la ciudad francesa de Lyon la Europa League frente al Olympique de Marsella. Los nervios están a flor de piel y, aunque se confía en levantar el trofeo, habrá que sufrir durante los 90 minutos. El papel de Diego Pablo Simeone, el entrenador del equipo rojiblanco, no será fácil pues, tras la sanción impuesta como consecuencia de sus insultos al árbitro francés durante las semifinales con el Arsenal, no podrá sentarse en el banquillo ni dirigirse a los jugadores desde el momento en el que su equipo entre en el estadio francés.
Muy cerca de él y apoyándole en todo momento sí estarán su pareja y su hija. Carla Pereyra y la pequeña Francesca viajaron a Lyon hace unos días y ya están preparadas para el gran encuentro. "ATLETI YO TE AMO!! Salimos ya hacia la final @europaleague !!! @atleticodemadrid que nervioss!!! Felices de poder compartir este momento con Papá @simeone y con toda la familia atletica!", ha escrito junto a una imagen en la que Carla luce lo que parece una bufanda con los colores rojiblancos y la cara de Simeone tras una bandera de Argentina, país de nacimiento del entrenador.
Carla y Francesca no han ido solas. La familia de la modelo argentina también ha querido acompañar al entrenador rojiblanco y, a las puertas del estadio Groupama, se fotografiaban todos juntos muy bien conjuntados con la equipación del club madrileño. Entre el "Simeone Team", además de la modelo- que posaba en el centro con su hija en brazos-, podíamos ver a los otros dos hijos de Diego Pablo Simeone, Giovani y Giuliano, fruto de las casi dos décadas de matrimonio con la modelo argentina Carolina Baldini, así como a su madre y su hermana, entre otros familiares.
Sin duda, la familia se convertirá en el mejor apoyo que el entrenador del Atlético de Madrid puede tener para este día tan emocionante y especial. Hace unos días, Carla revelaba las sorprendentes primeras palabras de Francesca, que demuestran que es la mayor fan de su papá. "Mi hija ya dice ¡Atleti!", confesaba. Francesca, la hija en común de la pareja, tiene ya más de un año y medio. La pequeña vino al mundo el 29 de septiembre de 2016, convirtiéndose en la mayor alegría y en el ojito derecho de sus padres.
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