Lo ha vuelto a hacer. Después de revolucionar las redes con sus bailes virales junto a Marc Anthony o cantando La bamba, Will Smith ha demostrado sus dotes artísticas bailando nada menos que reggeton con uno de las estrellas del género, Nicky Jam. El actor se unía de esta manera al 'X challenge', el desafío lanzado a través de la web y que consiste en imitar la coreografía del último éxito del artista colombiano, titulado X, interpretado a dúo con J. Balvin. Un singular reto que ha superado con creces y que ha dado la vuelta al mundo en apenas un día, con más de once millones de visualizaciones en su cuenta de Instagram. El protagonista de El príncipe de Bel Air es un artista polifacético al que no se le resiste ningún estilo, no en vano en sus comienzos ya despuntó como un destacado rapero.
El intérprete se encontraba en Cartagena de Indias (Colombia), ciudad en la que está rodando parte de las escenas de su nueva película, Gemini Man, y no quiso perder la oportunidad de rendirse a los encantos de la música que más triunfa en el país latino junto a uno de sus máximos representantes. De este modo, aprovechó una cena con el cantante en un restaurante local para deleitar a sus millones de seguidores con un divertido vídeo en el que también participa su hijo Jaden, que ha heredado todo su potencial, tanto en el mundo del cine como de la música.
Casi tan conocido como su padre -y con toda una legión de 'followers' en las redes sociales-, su presencia en el encuentro no fue casual, puesto que se encuentra inmerso en un proyecto profesional junto al músico. Esta peculiar pareja artística prepara una remezcla de Icon, uno de los temas más exitosos del segundo disco del joven de 19 años, cuya versión original cuenta con más 65 millones de reproducciones en YouTube. Sin duda, un trabajo que está generando mucha expectación entre sus fans y del que el artista latino quiso hacerse eco en su perfil oficial en Instagram con una imagen en la que aparece posando con Jaden, fiel a sus llamativos look con el pelo teñido en rubio platino.
Una vez más, el dicho popular 'de tal palo, tal astilla' puede aplicarse a la perfección en el caso de Will y Jaden Smith. Padre e hijo ya compartieron protagonismo en la gran pantalla hace años en la película En busca de la felicidad en 2006, aunque el polifacético 'millennial' ya había intervenido brevemente en otro de los grandes éxitos de taquilla de su progenitor, Men in black II, en 2002.