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Penélope Cruz ha sido la estrella que más ha brillado en la ciudad de la luz. La actriz, gran protagonista de la noche al recibir el César de Honor, ha desfilado por la alfombra roja de la Sala Pleyel de París ataviada con un impresionante diseño en color ultraviolet con cintura ajustada, escote palabra de honor en 'U' y una caída que ha llamado la atención por su juego de superposiciones. Al igual que hiciese en los Goya portando el abanico rojo, la madrileña ha lucido el lazo blanco, con el que los asistentes a los premios del cine francés han mostrado su repulsa a la violencia machista.
La intérprete de Volver reconocía a los periodistas que este galardón ha sido toda una sorpresa para ella. "No me lo esperaba pada nada. Me sorprendió muchísimo que me lo quisieran dar. En estos momentos tan especiales me viene a la cabeza las personas que han estado conmigo desde el principio, que me han apoyado". Marion Cotillard y Pedro Almodóvar subieron al escenario para entregarle a la madrileña el galardón. Penélope recogió el César muy emocionada, incluso se le escapó alguna lágrima y se mostró de lo más agradecida. “Tengo ganas de dar gracias a la vida. Ni en mis sueños más locos me habría imaginado aquí, en París, recibiendo el César de Honor”, comentó la artista en francés, según declaraciones que recoge El País. En un acto tan importante para su carrera, la de Alcobendas no quiso olvidarse del cineasta manchego. “Sabes que eres la razón por la que hago cine”, le dijo. “Gracias por el homenaje que rindes a las mujeres en tus películas y por hacerme participar en ellas”, comentó.
La parte más especial de su discurso llegó cuando dedicó el premio a su madre y a Javier Bardem. “¿Quién nos iba a decir esto, mamá? Gracias por no decirme que estaba loca cuando te dije que quería dedicarme al cine”, dijo. Para el hombre de su vida tuvo unas palabras de mucho afecto: “A mi marido, gracias por estar a mi lado, por ser un compañero maravilloso, por ese corazón tan grande que tienes”. Tras recoger el premio y algo más tranquila la intérprete reconoció que recibir este reconocimiento le ha conmovido. “Me he emocionado mucho ver a Pedro y las caras de mi familia”.
Tras la gala, los premiados se fueron de cena para celebrar sus triunfos. Fue entonces cuando Penélope Cruz se dio un baño de masas de muchos fans que la esperaban para saludarle fotografiarse con ella y pedirle un autógrafo. Para combatir el frío parisino, nuestra actriz más internacional llevó un abrigo negro con lentejuelas y se cambió de vestido. Para este acto Penélope, que se sentó junto a Javier Bardem en la velada, llevó un diseño de tirantes con pedrería en plata.
La actriz, a pesar de que ha posado sola en la red carpet parisina, estuvo muy bien acompañada por su marido y Pedro Almodóvar, única personalidad española que, hasta la fecha, había sido distinguida con este premio. El intérprete de No es país para viejos, que iba especialmente guapo con un estilismo black & white compuesto por traje de chaqueta blanca y pantalón negro que combinó con camisa blanca y pajarita negra.
Penélope ha recibido de manos de la Academia de las Artes y Técnicas del Cine de Francia el premio César de Honor 2018 por su dilatada y exitosa carrera. La academia francesa ha destacado la capacidad de la intérprete española, "musa de grandes cineastas" para brillar "tanto en grandes producciones internacionales como en películas íntimas". La española es la primera mujer en recibir esta distinción desde que lo hiciera Scarlett Johansson en 2014 y sucede a George Clooney, que recibió este premio honorífico en 2017 de la mano del actor francés Jean Dujardin.
El premio César de Honor se suma a su ya extenso palmarés, en el que destaca el Oscar como mejor actriz de reparto por el filme de Woody Allen Vicky Cristina Barcelona, con el que también ganó el BAFTA en esa categoría. Penélope también cuenta, entre otros galardones, con dos Premios del Cine Europeo por No te muevas y Volver y tres premios Goya por La niña de tus ojos, Volver y Vicky Cristina Barcelona.
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