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Sarah Jessica Parker no quiere seguir alimentando la polémica que la enfrenta a Kim Cattrall. La actriz ha preferido no responder a las duras palabras que su antigua compañera le dedicó tras la muerte de su hermano. “No eres mi familia. No eres mi amiga”, le espetó acusándola de “explotar su tragedia para restaurar su imagen de chica buena”, después de que Parker le ofreciera sus condolencias. No obstante, la protagonista de Sexo en Nueva York sí ha insistido en contar su versión de la historia en torno a la disputa surgida hace unos meses, cuando Cattrall cerraba la puerta a la posibilidad de rodar una tercera película de la saga.
Lo ha hecho a la revista People en una entrevista exclusiva publicada en su nuevo número. En ella, Sarah Jessica revela como se sintió después de que su ex compañera de reparto declarara en el programa Life Stories que la relación entre ellas era tóxica. “Dijo cosas realmente hirientes sobre mí”, afirmó la actriz. A pesar de ello, parece estar dispuesta a quitar importancia a la supuesta tensión existente entre ellas. “No hubo pelea. Fue algo completamente inventado porque, en realidad, yo nunca respondí a aquellas declaraciones y no lo haré. Ella necesitaba decir lo que dijo y estaba en su derecho”, sentenció la estrella.
Con estas palabras, la intérprete que dio vida a la inolvidable Carrie en la serie y en las dos películas posteriores, dejaba claro que, por su parte no existía ningún conflicto con Kim. Asimismo, confesó sentirse algo decepcionada ante el hecho de que no fuera a realizarse un tercer filme de Sexo en Nueva York. Sarah Jessica recuerda con mucho cariño aquella etapa de su vida, de la que solo puede hablar de manera positiva: “Tuvimos la suerte de vivir aquella experiencia y fue increíble, nunca nada volverá a ser igual. Hubo una conexión especial con la audiencia, con la ciudad y con el equipo. No quiero estropear eso y no puedo imaginar que alguien quisiera hacerlo”.
Fue Kim Cattrall quien abrió la brecha entre ella y sus antiguas compañeras con las sorprendentes declaraciones realizadas al citado espacio Life Stories el pasado octubre. La actriz (que interpretaba a Samantha Jones) culpaba a la serie de no haber podido cumplir su deseo de ser madre. Además, aclaraba cómo era su relación con el resto del reparto. “Nunca fuimos amigas. Éramos colegas y creo que de alguna manera era bastante sano, porque así se tiene muy clara la línea entre tu vida profesional y personal”, reveló al presentador Piers Morgan. No obstante, la peor parte se la llevó Sarah Jessica, de la que afirmó que “pudo haber sido mucho más amable”.
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