Las autoridades de Los Ángeles señalaron al actor Robert Wagner como una "persona de interés" dentro de la investigación por la muerte en 1981 de su entonces mujer, la actriz Natalie Wood. El teniente del departamento del aguacil del condado de Los Ángeles John Corina afirmó a la cadena CBS que Wagner, de 87 años, es una "persona de interés" en el caso sobre Wood, que fue reabierto en noviembre de 2011.
Según CBS, que emitirá el próximo sábado Natalie Wood: Death in Dark Water dentro de su espacio de investigación 48 Hours, Wagner se ha negado a hablar con los investigadores desde la reapertura del caso.
El 29 de noviembre de 1981 Natalie Wood apareció ahogada en las proximidades de la isla californiana de Santa Catalina, donde pasaba el fin de semana junto a su marido Robert Wagner y el actor Christopher Walken. La muerte de la intérprete, de 43 años, causó una gran conmoción debido a su enorme popularidad. En su momento, la investigación determinó que la actriz, después de haber bebido en exceso y de mantener una discusión con Wagner, quiso dejar el yate en el que se encontraba. Según esa versión, intentó subirse en un bote de goma pero se cayó al agua y se ahogó, puesto que no sabía nadar.
Los investigadores, en un principio, dictaminaron que su fallecimiento se debió a un ahogamiento accidental, si bien en 2013, tras la reapertura del caso, matizaron que se debió a un "ahogamiento y otros factores indeterminados".
Con tres nominaciones al Oscar en su haber y protagonista de filmes hoy clásicos, como Rebelde sin causa, Esplendor en la hierba o West Side Story, Natalie Wood vivió una tormentosa relación con Robert Wagner, el hombre con quien se casó dos veces. La primera, en 1957. Cuatro años después se separaban, no sin escándalo. Años más tarde, sus vidas volvieron a cruzarse y se dieron una segunda oportunidad. Se casaron el 16 de julio de 1972. La ceremonia se celebró a bordo de un barco anclado frente a las tranquilas costas de isla Catalina. Nueve años más tarde, este era el mismo escenario de su muerte.
Desde pequeña, tras un accidente durante el rodaje de la cinta La tierra prometida, Natalie Wood sentía un miedo enfermizo por el agua. Y fue en las aguas del océano Pacífico donde su cadáver fue hallado. Tenía 43 años y toda la vida por delante. Y cuenta la leyenda que, cuando su madre, una emigrante rusa muy ambiciosa, estaba embarazada de Natalia Nikolayevna Zajarenko (el nombre verdadero de la actriz), una anciana adivina le dijo: “Su hija será una gran estrella, pero deberá tener mucho cuidado con las aguas oscuras”. El oráculo, en este caso, se cumplió.