Las vacaciones de Navidad le están sentando a las mil maravillas a Neymar. El delantero del París Saint-Germain ha decidido viajar hasta Brasil, su tierra natal, en busca del buen tiempo y de unos días de desconexión para recargar pilar de cara a los próximos entrenamientos con su equipo, que está previsto que se reanuden este miércoles, 3 de enero. El astro del balón, de 25 años, ha estado en la exclusiva isla brasileña de Fernando de Noronha -un paraíso natural situado a unos 350 kilómetros de Natal, la capital de Rio Grande do Norte (sureste), destino preferido de numerosas celebrities debido a su exclusividad- y allí se reencontró con su exnovia, la actriz Bruna Marquezine, de 22 años. Un día más tarde, el jugador publicaba en su perfil de las redes sociales una imagen en la que aparece besando a Bruna, lo que ha desatado los rumores ante lo que podría ser una reconciliación de la pareja.
El futbolista y la artista, conocida por su participación en varias telenovelas, disfrutaron mucho de la velada donde había un gran número de rostros conocidos del país carioca como la modelo brasileña Izabel Goulart, exángel de Victoria's Secret, y su pareja Kevin Trapp, portero del Paris Saint-Germain, mismo club en el que milita Neymar. En un momento de la noche Bruna y el jugador se besaron, según imágenes publicadas en varios medios locales, apunta Efe. Un día después de la gran fiesta el astro brasileño publicaba una fotografía en su perfil de Instagram que ha hecho que los rumores ante una posible reconciliación de la pareja hayan cobrado fuerza. En la instantánea se ve un primer plano de la pareja besándose junto a un texto que es toda una declaración de amor del futbolista hacia la actriz. "Cuando vi, ya estaba en tus brazos... te quiero", unas palabras acompañadas de un emoticono de un corazón. Una instantánea y un mensaje de lo más revelador. Bruna, por su parte, no ha publicado en sus redes sociales ninguna fotografía reciente en la que aparezca con su ex.
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Desde que comenzaron a salir, en el año 2013, su relación ha sido intermitente y ha estado llena de idas y venidas. A mitad de 2017 ponían fin a su relación por tercera vez después de que a principios de año se dieran una nueva oportunidad. "Fue una decisión de ambas partes, ella es una chica que admiro y deseo con fuerza su felicidad, no sólo en lo profesional sino también en la vida personal. Espero que sea feliz, la vida sigue. Terminamos como buenos amigos", añadió Neymar en junio. El detonante de su última ruptura habría sido la negativa de Bruna de pasar por el altar, según apuntó el portal de noticias UOL. Solo el tiempo dirá si este apasionado beso se materializa en una nueva oportunidad, la cuarta que se darían, o si por el contrario, tras la Navidades, cada uno hará vidas por separado.