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Ha sido un año muy intenso para las Campos, y es que les ha pasado de todo: han celebrado con mucha alegría una noticia muy esperada, han vivido episodios un poco amargos y también han tenido que enfrentarse a uno de los capítulos más duros de su vida, cuando María Teresa sufrió un ictus la pasada primavera. Tanto ella como sus hijas, Terelu Campos y Carmen Borrego, han salido al paso de rumores y todo tipo de críticas, respondiendo y dando su propia versión con la mayor entereza posible, aunque, en los momentos más complicados no hayan podido evitar las lágrimas.
Sin embargo, han despedido el 2017 de una forma que jamás olvidarán. Acompañadas de parte del equipo y cargadas de maletas, la popular presentadora y sus hijas cruzaron el charco para poner rumbo a Nueva York, donde grabaron un nuevo programa de su reality que promete muchas sorpresas, además de ser el broche de oro para terminar su año más complicado. Después de causar un verdadero revuelo en la ciudad de los rascacielos, donde una de las imágenes más comentadas fue la de María Teresa Campos delante de la famosa joyería Tiffany, convertida en la mismísima Audrey Hepburn en la película Desayuno con Diamantes, su periplo al otro lado del charco también incluyó una visita a Miami, donde tampoco pasaron desapercibidas. ¿Su siguiente destino? Japón, donde se sumergirán "en una aventura futurista y tecnológica". Óscar Cornejo, creador, productor ejecutivo y codirector del programa, declaró que: “Las Campos son las mujeres más influyentes de España en este momento. Las influencers son unas aprendices a su lado. Nos hemos ido a la otra punta del mundo y aun así tenían paparazzi escondidos en cada papelera”.
El pasado mes de abril, acabó una de las etapas más especiales de la vida de María Teresa Campos. La popular presentadora tuvo que decir adiós a su programa ¡Qué tiempo tan feliz! después de que la cadena tomara la decisión de retitarlo de la parrilla. Tras ocho años en antena y 664 programas llenando de actualidad y música las tardes de los sábados y domingos, María Teresa y sus colaboradores se despidieron de los telespectadores con lágrimas en los ojos. "Hoy cerramos esta puerta pero estén atentos porque pronto se abrirá una y saldré por ella", dijo emocionada.
Y es que además de la tristeza por el fin de su programa en Telecinco, había otro motivo que le había afectado mucho: la participación de Edmundo Arrocet en Supervivientes. Respetó su decisión, pero es cierto que estaba muy preocupada por él. "Está fuerte y está bien, aguanta todo, pero no deja de tener una cierta edad. Todo me afecta mucho", confesó la presentadora antes de que se fuera a la isla, reconociendo que la edad de su pareja es la razón por la que no quería que fuera a Supervivientes: "He estado muy feliz con él antes de irse. ¿Que me he separado? No. ¿Que me he enfadado? Sí. Me enfadó que fuera, por lo de la edad".
Precisamente durante su estancia en Honduras, la familia Campos tuvo que enfrentarse a un momento muy complicado. El 16 de mayo María Teresa tuvo que ser ingresada en la Fundación Jiménez Díaz, en Madrid, tras sufrir un ictus cerebral. Todos estuvieron a su lado, dándole su cariño y su apoyo incondicional, sobre todo sus hijas, que vivieron días muy difíciles. Sin embargo, tras llevarse este susto, la propia presentadora reconoció que había aprendido una lección: "Cuando la vida te da un susto, uno cambia. Hay que saber valorar qué cosas merecen la pena". Ahora que ya han pasado unos meses, María Teresa se ha ido reponiendo poco a poco de este revés, así que pronto estará de nuevo reincorporada al trabajo con un formato nuevo, del que aún no se conocen muchos detalles."Ahora tengo que recuperar fuerzas, reintegrarme a mi trabajo", aseguró en el programa de Risto Mejide.
Para Terelu Campos y Carmen Borrego tampoco ha sido un año fácil. Las dos sufrieron mucho con el ingreso de su madre y dijeron 'basta' debido a los duros ataques contra ellas que tuvieron que escuchar. Carmen vivió momentos complicados durante su presencia como colaboradora en el plató de Supervivientes -donde siempre defendió a Edmundo y la relación que mantiene con su madre-, además de tener que enfrentarse a las informaciones que salieron a la luz haciendo referencia a un pasado difícil. Terelu, por su parte, ha sido una de las grandes protagonistas del año en Sálvame, no solo por sus comentadas declaraciones sobre su vida, sino también por los tristes días que pasó cuando su continuación en el programa parecía que pendía de un hilo.
Eso sí, Terelu tiene más de un motivo para sonreír y es que durante este 2017 ha tenido dos 'regalos' muy especiales: la publicación de su libro, Frente al espejo, y la feliz noticia que anunció en las páginas de ¡HOLA! este verano en su entrevista más reveladora. "Por fin ha llegado el día... ¡Estoy curada!", dijo la hija de María Teresa Campos. Y es que después de cinco años luchando contra el cáncer, Terelu abrió su corazón en una entrevista que le hizo su hermana Carmen, con la que repasó sus miedos, sus alegrías y los últimos acontecimientos de su vida y de su familia.
UN FIN DE AÑO MUY ESPECIAL
Para cerrar este año, vivirá también una experiencia inolvidable y es dar las Campanadas en Telecinco. Pero no lo hará sola, sino que junto a ella estarán otros cuatro colaboradores de Sálvame, como Lydia Lozano y Kiko Hernández. "Gracias porque es la recompensa a más de 30 años de trabajo", dijo Terelu, que se quitó los tacones para saltar y celebrar la noticia. Tal y como ha confesado la propia María Teresa Campos, este año celebrarán las fiestas todos juntos, tanto con su familia como con la de Edmundo. "Yo creo que vamos a estar la familia al completo. La Navidad es familia y es cariño", aseguró a Sálvame. "He aprendido a no pedir. Es un año que empieza y pongo en él la misma ilusión que he puesto en todos los demás. Te advierto que me han venido muchas cosas buenas últimamente, aunque no las he publicado". ¿A qué se referirá? ¿Nos darán alguna buena noticia para empezar el 2018?
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