La familia Beckham parece estar disfrutando de sus vacaciones navideñas. Eso es lo que podemos percibir al ver las redes sociales de Victoria Beckham y su hijo mayor Brooklyn, donde han compartido- entre otros momentos- una tarde en la cocina preparando pizzas caseras o un momento de relax con una copa de vino tinto. Eso sí, no era un vino cualquiera.
La diseñadora mostraba en su Instagram Stories cuál era la botella elegida para la ocasión: un Screaming Eagle californiano que, dependiendo de su año de producción, puede tener un precio en el mercado de alrededor de 3.000 €. Una indicación que Brooklyn cubrió con su mano, aunque la edición más barata de este vino cuesta unos 500 €.
David y Victoria, junto con todos sus hijos, han aprovechado estas fechas para realizar un retiro campestre a los Cotswolds, donde se encuentran desde el pasado fin de semana coincidiendo con el regreso a casa por Navidad de Brooklyn, que se trasladaba el pasado mes de agosto a Nueva York para cursar estudios superiores de fotografía en la prestigiosa escuela de diseño Parsons Private Art and Design School.
Esta zona de monte ubicada al sudoeste y oeste de Inglaterra está considerada de "Belleza Natural Sobresaliente", por ello, toda la familia ha querido compartir momentos de este gran viaje y de su idílico refugio en redes sociales. "¡Estoy tan feliz! Todos mis niños juntos. Brooklyn está en casa. Os quiero. Besos", escribía la orgullosa mamá días antes de comenzar su aventura.
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El matrimonio Beckham es gran amante del buen vino, algo que están inculcando a su hijo mayor. Esta no es la primera vez que el exfutbolista y la diseñadora tiran la casa por la ventana con esta pasión. Recientemente disfrutaron de una degustación durante una noche de fiesta y no tuvieron reparo en gastar cerca de 2.000 euros por tres botellas de tinto: un Chateux Margaux Grand Vin 1995, que se vende por unos 700 €; el Chalafleur Pomerol 2006, que se adquiere por unos 600 € y el Chateau Cheval 2012 Premier Grand Cru Class, que puedes comprar por unos 450 euros.
Esta afición es de hecho la clave de la estrecha amistad de la diseñadora con su amiga Eva Longoria, que espera su primer hijo junto a su marido Pepe Bastón. "Nos encanta hablar de vino. Quizás es por eso que nos llevamos tan bien", dijo durante una entrevista reciente en el programa de televisión This Morning.