Hoy es un día muy especial para Adriana Abenia y Sergio Abad. La pareja celebra este lunes su segundo aniversario de boda, una fecha que no han pasado por alto en sus redes sociales, como refleja esta preciosa imagen en blanco y negro. "No cambio ni un minuto de esta historia", ha escrito él en su cuenta de Instagram. "Yo tampoco cambiaría ni un minuto de esta historia", ha añadido ella.
La foto ha sido tomada en Florencia, ciudad a la que se han escapado para disfrutar de unos románticos días. Antes de visitar la Galería Uffizi, Adriana ha compartido su espectacular amanecer con vistas desde el Palazzo Alfieri.
La revista ¡HOLA! fue testigo de la original boda en la intimidad de Adriana y Sergio, que tuvo lugar el 18 de diciembre de 2015 en la Ciudad de la Justicia de Zaragoza, localidad natal de la pareja. Después de tener que aplazar su enlace, previsto para junio de 2014, por motivos profesionales, ambos decidieron que, después de tantos años juntos, debían formalizar su relación, y así lo hicieron, rodeados de los suyos, tan solo siete invitados, sus respectivos padres, sus hermanas y la abuela de la popular presentadora.
Vestida con una falda de tul combinada con un bodi en plata y dándole un toque personal, al más puro estilo de Sexo en Nueva York, con una cazadora perfecto, Adriana contraía matrimonio con el hombre de su vida. "Quería que mi vestido no fuera un vestido al uso, quería darle el punto roquero al vestuario", declaró.
Adriana, que se ganó el cariño de la propia reina Letizia, por entonces Princesa, gracias a su espontaneidad durante su trabajo en el programa Sálvame, sellaba con Sergio su intensa historia de amor antes de poner rumbo a su luna de miel. El destino, París, una ciudad plagada de recuerdos para los dos, no solo por ser el lugar en donde Adriana vivió hace algunos años, sino también porque fue allí donde su ya marido le pidió la mano.
- La pregunta que ha hecho estallar a Adriana Abenia
"Yo siempre he ido como los salmones, a contracorriente. Y estaba convencida de que nunca me vestiría de novia, que no me casaría y que jamás tendría hijos", confesó la presentadora. "No me habría imaginado mi boda así ni hace tres meses. Soy muy imprevisible. A mí me hubiera gustado casarme en patines, pero imagínate que me caigo y tengo que volver a cancelarla", bromeó.
En aquel momento, aseguraba que la maternidad no le llamaba la atención, sin embargo, recientemente manifestó su deseo de tener hijos. "Ahora sí tengo ganas. Nunca se sabe. De repente igual doy la sorpresa. Antes era muy reacia a todo esto, pero la vida te va cambia incluso la manera de pensar y quién sabe si puede surgir algo en 2018", declaró a Europa Press el pasado mes de noviembre.