Nicole Kidman reaparece en la alfombra roja tras el multimillonario regalo de su marido

Con un aspecto rejuvenecido, la melena suelta, muy sonriente y con un impresionante vestido de Altuzarra. Así reaparecía anoche Nicole Kidman en la alfombra roja de la 27ª edición de los Gotham Independent Film Awards. Nicole brilló enfundada en el diseño de la colección primavera – verano 2018 de la maison francesa; una magnífica pieza de lentejuelas color azul petróleo, tirantes y escote pronunciado en forma de V, pedrería bordada en la parte superior y abertura lateral que dejaba a la vista una de sus kilométricas piernas.

La actriz derrochaba felicidad, motivo por el cual consiguió – además de por su vestido – acaparar la mirada de todos los presentes a su llegada al icónico edificio Cipriani, ubicado en la zona financiera de Manhattan, en el que se celebró la entrega de premios. Sea como fuere, la actitud de Kidman sobre la alfombra roja esconde un ‘pequeño’ motivo por el cual tampoco sorprende ese derroche de magnetismo, sonrisas, confidencias y abrazos con actrices, como el que se dio con Reese Witherspoon, compañera en la ficción Big Little Lies. 

Hace tan solo unos días, el nombre de la ‘chica Amenábar’ se convertía en titular de numerosos medios internacionales tras conocerse la noticia del lujoso y romántico regalo que acababa de hacerle su marido. Kidman lleva más de una década casada con el cantante de country Keith Urban. Juntos han formado una bonita familia junto a los dos hijos que tienen en común, Sunday y Faith Urban, de 9 y 6 añitos respectivamente.

A pesar de los numerosos compromisos profesionales que ocupan las agendas del popular matrimonio, durante años Nicole Kidman y Keith Urban han vivido en una enorme mansión en Nashville, Tennessee. Y aunque la actriz ha confesado en más de una ocasión que adora vivir en la capital de la música country, lo cierto es que su sueño siempre ha sido vivir en la Gran Manzana.

Para cumplir los deseos de la oscarizada actriz, Urban ha invertido nada más y nada menos que la friolera cantidad de 33,5 millones de euros en un ‘pisito’ ubicado en el Upper East Side de Manhattan. Una casa de seis pisos, 16 habitaciones (siete de las cuales son dormitorios), ocho baños y 10 chimeneas. La nueva y lujosa residencia de Kidman fue construida en 1898 y, además, cuenta con un patio interior y una azotea acondicionada como terraza.

“Nicole está ansiosa por actuar en Broadway y hacer programas de televisión, y Nueva York es un lugar mucho mejor para ello que Nashville”, asegura una fuente cercana al matrimonio para la revista Women’s Day. “Nueva York tiene algunos de los mejores colegios del país y las niñas podrían beneficiarse realmente de ese traslado”, añade.

La residencia, a la que la actriz tiene previsto mudarse con sus hijas pequeñas –también es madre de Connor e Isabella Jane, de la relación que mantuvo con Tom Cruise-,  fue propiedad de Michael Jackson y, más recientemente del millonario Marc Lasr.