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Después de habérseles visto juntos en varias ocasiones, comenzaron a aparecer los primeros rumores en torno a Isabel Sartorius, de 52 años, y César Alierta, de setenta y dos, histórico expresidente de Telefónica. Finalmente la noticia acerca de su amistad salió a la luz en LOC, donde se matizaba que “todavía es pronto para hablar de noviazgo”. En las páginas de la revista ¡HOLA! de esta semana, a la venta este martes en tu quiosco, podrás leer la crónica de esta historia inacabada, que parecía un enorme paso para Isabel. La coach señalaba en una de sus últimas entrevistas: “Que alguien entre en tu vida de verdad significa que, de alguna manera, tienes que dividir tu cerebro en dos. Estoy segura de que, por mucho que quisiera a esa persona, habría momentos en los que intentaría deshacerme de ella... Desafortunadamente para mí, de alguna forma siempre me las apaño para no atarme con nada ni con nadie”.
También parecía un gran paso, de alguna manera, para César Alierta, profundamente herido, tras la muerte de su esposa Ana, después de un feliz matrimonio que duró medio siglo. Querían discreción y tiempo –demasiado pronto para hablar de noviazgo o para dar un paso más-, querían saber ver hasta dónde podía llevarles su profunda amistad y su mundo en común en unas vidas tan diferentes, pero no fue posible.
Ahora las fuentes apuntan a ¡HOLA! que la visibilidad de su amistad habría alterado la situación, la relación de dos personas adultas y libres que se están conociendo. No hay fotos de los dos juntos ni declaraciones respecto a esa “ilusión” que estarían viviendo, pero igualmente la prensa española se ha hecho eco de la noticia dando un nuevo espacio a César Alierta, que siempre ha estado ligado a las páginas de economía, y convirtiendo de nuevo a Isabel en protagonista, casi treinta años después de haber estado en el punto de mira como novia del príncipe Felipe y tras años de discreción.
Tienen muchos amigos en común, pero su relación se ha forjado en los últimos siete meses, desde que Isabel empezó a trabajar en la fundación solidaria Profuturo, presidida por César Alierta y en la que Isabel trabaja para África con niños y adolescentes desfavorecidos –fue en un viaje de regreso a Madrid desde Nigeria cuando comenzaron a tratarse-. Habrá más viajes y seguramente más cenas. Son amigos y se tienen gran aprecio, pero ahora es tiempo de reflexión, un momento de incertidumbre que puede dar lugar o no a otro paso en su relación, en una historia inacabada. La información completa la podrás leer en las páginas de la revista ¡HOLA! de esta semana, que está ya a la venta en tu quiosco.
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