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Jose Coronado ha estado este jueves junto a Eva González en la presentación de un acto como imagen de la firma Cortefiel en Madrid. El actor ha hablado de sus proyectos, de la moda, de la relación con sus hijos y de cómo es su vida tras el infarto que sufrió el 15 de abril de 2017 en su casa de Madrid cuando tuvo que se ingresado en el hospital.
Te recordará todo esto a tu época como modelo…
Yo es que lo de modelo nunca lo establecí como carrera. Yo estaba estudiando. Primero medicina, luego Derecho y lo de modelo me servía para sacarme unas pelas. Y, al principio, me daba bastante vergüenza… Lo que pasa es que me empezaron a ofrecer… siempre he contado la anécdota: un anuncio, dos suecas, en Menorca, un barco y una pasta y dije: esto es maravilloso. Así que lo utilicé para ganarme mis dinerillos y para durante cuatro o cinco años darme la vuelta al mundo varias veces. Y aprender y viajar… Luego monté una agencia de modelos al mismo tiempo que varios negocios de hostelería… pero lo de modelo es algo que yo respeto mucho, pero que también sabía que te daba de comer hasta los 30 y que tampoco me sentía realizado. Eso sí, benditos años de moda que los pasé estupendamente.
Nicolás ha hecho un poco como tú…
Claro que sí. Mi hijo sabe que en la vida hay que torear lo que te toque, que ya vendrán los miuras cuando tengan que venir, pero lo que no puedes esperar es que te lleguen desde el principio, que hay que empezar por vaquillas o lo que se mueva.
¿Te has sentido cómodo con Cortefiel?
Sí porque es una marca a la que tengo cariño y lo está haciendo muy bien. Que combina muy bien la elegancia con lo informal, que marca tendencias… No hay nada más que ver la tienda de Goya, que es una maravilla.
¿Eres un hombre que se preocupa mucho por la moda?
Muy poquito, para qué te voy a engañar. No tengo tiempo. Estoy siempre estudiando mis personajes y estoy a lo que estoy, a lo que me apasiona. Y que soy muy básico en el vestir. NO me gusta además ser un borrego de lo que digan que hay que ponerse. Siempre me he puesto lo que me ha dado la gana, lo que me gusta y lo que he tenido. No arriesgo tampoco. Apuesto por la comodidad y por no perder el tiempo. Yo madrugo siempre y no puedo estar con "el qué me pongo". Mira, el mismo vaquero para toda la semana, siete camisetas y siete calzoncillos. Nada más (risas).
Con tu hijo compartes armario, ¿compartes más cosas?
Lo comparto todo. Vive conmigo desde los 7 o 8 años. Lo compartimos todo. No solo somos padre e hijo, es que Nicolás es mi mejor amigo. Yo le cuento mis problemas y viceversa.
Estás más delgado ¿por un papel?
No, no porque tengo que levantarme a las 6 de la mañana y trabajar hasta las 8 de la tarde y este es un trabajo en el que estás todo el día moviéndote. Y eso te obliga a mantenerte en forma porque yo como como un…
Y que el susto que te diste te obligará a cuidarte más.
Sí, sí pero sin volverme loco.
¿Cuantos kilos has perdido?
No tengo ni idea. Ni lo sé ni me importa. Ni las pastillas que como… A ver, la vida me dio un aviso que he entendido y que me ha hecho simplemente, más que tomar más precauciones, valorar el día a día como lo valoro ahora y relativizar más ciertas cosas que antes me importaban más o me obsesionaban.
¿También por el paso del tiempo?
Todo ayuda. Pero el infarto te hace pensar. Te tiene toda una semana pensando en el de dónde vienes, dónde estás y el adónde vas.
Pero, ¿estás bien, no?
Sí, sí, Fenomenal. Mejor que nunca.
¿Vas al médico a tus revisiones no?
Sí, voy al médico… Estuve ayer y me dijo que estaba todo fantástico y que mejor que cuando me dio… Hago mi vida absolutamente normal. Hago deporte que hay que hacerlo siempre, no fumo… Bueno, alguna vez, a escondidas, un poquitín, porque no te voy a engañar: un hábito de 40 años es muy difícil quitártelo. Y ando, para que el corazón se mueva. Padel, caballo cuando hay un caballo, voy en moto, pero sobre todo ando. El corazón perfecto… en todos los sentidos.
¿También el sentimental?
(Risas) Fantástico. Lleno de alegría. Siempre lo ha estado. Toda mi vida. Soy un privilegiado con un corazón muy satisfecho y contento.
¿Qué tal por Galicia rodando?
Ahora cabreado con el mundo. Estamos locos y no sé dónde vamos a llegar. Galicia es un paraíso maravilloso. Así que disfrutando de lo que estoy rodando allí que va a estar muy bien.
También has rodado El Dorado y ha quedado muy bien.
Es una película de aventuras, visualmente preciosa, con una estética estupenda que narra como 40 descerebrados buscan El Dorado y lo pensaba, no sé cuantos aragoneses, catalanes, castellanos… y ya entonces estábamos dándonos de leches y así seguimos todavía sin resolver nuestros asuntos…
Y la peli que rodaste con Sharon Stone ¿Cuándo se estrena?
La rodamos hace un año y medio y no sabemos qué ha pasado. A ver, los productores eran un poco… oscurillos… (risas) No sé, era una producción rara. De unos ucranianos, forrados de dinero, y para mí que ahí había un poco de blanqueo ¿no? (risas) Dos años y sin estrenar…
¿Cómo es Sharon Stone?
Ella es una mujer maravillosa. Y estupenda. Es verdad lo que dicen de su coeficiente de inteligencia. Es una mujer muy muy inteligente y luego, muy natural. Recuerdo que estaba también en la película Miguel Ángel Muñoz y estábamos en el Hilton de Bucarest para una primera reunión y teníamos en frente a Sharon. Era verano, ella llevaba una falda corta y, de repente, zas, nos hizo el cruce de piernas (risas) "Tío, que nos lo ha hecho a nosotros", me decía Miguel Ángel. "Pues sí, compañero" (risas) Muy bien. Una experiencia más.
¿Y ahora qué tienes?
Tengo otra serie, con Enrique Urbizu, Gigantes, con Movistar y en enero hago una ópera. Es algo que me apetece bastante. La dirige José Carlos Plaza y es con la Orquesta Sinfónica de Moscú y 200 personas en escena. Yo soy el narrador y a veces, me convierto en Iván 'El Terrible'. Me apetece eso de las 200 personas y ser yo un instrumento más.
¿Estrenáis en el Real?
No, no estaremos en Madrid. Serán diez funciones e iremos a Canarias, Bilbao. Valencia… me da penita no estar en Madrid.
¿Cómo te da la vida para tanto?
Porque hablábamos del corazón, porque es mi gran amor. Mi profesión es mi gran amor. Estoy muy enamorado de ella y es lo que me hace levantarme con una sonrisa más que nada. Tengo la suerte de ser un actor que se levanta y siempre tiene trabajo. Y trabajo aquí en mi tierra, no tengo ningún interés en salir.
¿Y dirigir?
Me encanta, pero te lleva mucho tiempo. Hacer una película es un año y medio y en ese tiempo yo me hago una serie, dos películas y una obra de teatro.
Tu hija ¿qué te dice? ¿Opina de tus trabajos? ¿Qué le parece tener un galán en casa?
Mi hija tiene 15 años y por ahora opina poco. No opina no. Para ella lo importante es tener a un padre que la quiera, lo demás le da igual. Desde pequeña está acostumbrada y me quiere para que la quiera y la mime.
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